Milagro le hizo honor a su nombre
Milagro Vargas le hizo honor a su nombre pues sobrevivió, junto a su esposo Ronald Vindas, a un violento accidente de tránsito en el que, lamentablemente, perdió la vida el taxista informal Juan Antonio Araya, de 58 años.
“En realidad me convertí en un milagro”, dijo Vargas La Teja.
El fatal choque ocurrió poco después de las 10 de la noche del pasado sábado en La Palma de Parrita, del restaurante La Carreta, 100 metros en dirección hacia San José.
Nos estábamos ahogando debido al latigazo producido por el choque, no podíamos respirar”. Milagro Vargas sobreviviente
Milagro y su esposo, quienes viajaban en un pick up, fueron a la frontera sur a comprar algunas cosas y cuando iban de regreso para su casa, en Heredia, ocurrió el accidente.
“Él (Araya) venía adelantando un tráiler, pero nunca se acomodó de nuevo en su carril, nosotros teníamos la esperanza de que regresara a su carril, pero cuando nos dimos cuenta ya teníamos las luces de él encima”, recordó Vargas.
Trató de esquivarlo. Vargas contó su esposo trató de esquivar el carro de Araya, pero no lo logró, por lo que el taxi informal impactó el lado del acompañante, donde iba ella.
“Del tironazo del cinturón me quedaron moretes en la pelvis y en el estómago, todo lo que es el pecho y el hombro estoy muy adolorida, mi esposo sufrió heridas en la cara, porque él pegó contra el volante, le tuvieron que hacer dos suturas en una rodilla y un codo también se lo lesionó, de verdad que fue muy aparatoso”, contó.
Ayuda inmediata. Debido a la violenta colisión, el taxista murió dentro de su carro, mientras que Milagro y Ronald quedaron atrapados dentro en el pick up. Afortunadamente la ayuda llegó rapidísimo.
“La atención fue inmediata, porque la Cruz Roja y los bomberos estaban como a los 500 metros de ahí, fue como al minuto que llegaron, me sacaron a mí primero porque no me podía mover y nos llevaron al hospital.
“Nos hicieron ultrasonidos y placas, a mi esposo lo mandaron al hospital de Heredia para hacerle un TAC, pero ya gracias a Dios ambos regresamos a casa este domingo”, dijo Vargas.
Celebración. Hoy más que nunca Milagro sabe que su nombre tiene un significado muy especial. Ella le atribuye el seguir con vida a Dios.
“Sinceramente lo que nos salvó fue la mano de Dios, porque Él nos guardó a ambos, pienso que también influyó el hecho de que anduviéramos en un pick up, porque si hubiéramos ido en un automóvil posiblemente no estaríamos aquí para contar la historia”, destacó.
Vargas también contó que el jueves 25 de noviembre, dos días antes del accidente, su esposo estuvo de manteles largos, por lo que ella ahora le dice que el sábado él renació.
Ahora que vienen la época festiva con las celebraciones de Navidad y fin de año, Milagro dijo que ella y su familia tienen un motivo más para celebrar la vida juntos.