Haga meriendas con sabor a salud
Miles de niños regresaron este jueves a las aulas de manera presencial, por lo que las meriendas se convirtieron en parte del día a día..
Tanto los tatas como los encargados de los comedores escolares deben tener una manipulación adecuada de las comidas, para evitar que los niños sufran alguna intoxicación o se enfermen de la pancita.
Recuérdele a sus hijos que se laven las manos con agua y jabón antes de comer o se desinfecten con alcohol.
Lo más importante de la merienda es que sea saludable y que los pequeños cumplan con buenas prácticas de higiene.
“Las meriendas constituyen una fuente de vitaminas y minerales necesarios para el crecimiento y desarrollo de los niños. Para cubrir los requerimientos diarios de nutrientes es necesario que se consuma variedad de alimentos como por ejemplo, lácteos (yogur, queso o leche), frutas, vegetales, alimentos de origen animal y carbohidratos (cereales, pan integral, granos o semillas)”, explica Francisco Herrera, nutricionista de Dos Pinos.
A veces se descuida el recipiente donde lleve la comidita, así que elija uno que el niño pueda abrir fácilmente para evitar que deba pedir ayuda a los maestros o a sus compañeritos.
Y pese a que se lave las manos antes de comer, mándele comida que implique el menor contacto posible. Por ejemplo si le manda frutas, envíela cortada para que se la coma con un cubierto o pincho.
Para tomar, que lleve su termo aparte con un batido de frutas o vegetales hecho en casa, o una cajita individual y cerrada de yogur o leche.
Las semillas de girasol, chía y nueces, son una fuente importante de nutrientes y energía para ellos.