¿Se devolverá en el Chunche de la Liga?
Mauricio “Chunche” Montero está empezando a sacar a flote el barco de Jicaral, equipo que muchos condenaron al descenso antes de tiempo.
El Huracán lleva siete puntos, le arrancó un empate al campeón nacional de visita el jueves y ya le ganó en casa a Santos y a Guadalupe. La idea del Chunche empieza a calar en los muchachos y equipos como Guanacasteca o San Carlos están en la mira.
Por eso decimos, medio en serio y medio en broma, que mañana Montero le termina de dar el golpe a su querida Alajuelense y se regresa en el bus con los rojinegros como nuevo técnico, en vez de Albert Rudé, que lleva dos derrotas consecutivas y su equipo no gusta.
¿Qué dijo el Chunche cuando le hablamos de esa hipotética posibilidad? Fiel a su estilo, lo tomó con humor, se echó una carcajada de unos cinco segundos y luego se puso serio.
“Mi obligación es ganar, que el equipo juegue bien, eso es fundamental, el resto queda en manos de Dios porque hay veces que uno se desespera, quiere las cosas ya, pero no se sabe si se va a dar o no.
“Ya Alajuela la han tenido compañeros que se han retirado mucho después que yo, les han dado la oportunidad.
Yo he llevado una carrera prácticamente como se tiene que hacer, escuela de fútbol, tercera, segunda, ligas menores, un paso por primera división, luego segunda con tres diferentes equipos y me ha ido bien. He hecho los pasos, gatear, caminar y correr, pero solo Dios sabe si se dará pronto”, expresó el Chunche.
–¿Un triunfo de Jicaral será un duro golpe al liguismo?
Es un partido difícil por el tipo de jugador que tiene la Liga y en la situación en que está. Prefiero enfrentarme a algunos de los grandes cuando están bien, porque se pueden descuidar y nosotros aprovecharnos de eso, que nos menosprecien, por ejemplo, pero en la situación que están van a venir con todo. Tenemos que ganar el partido si queremos dar un paso al frente.
–¿Hay aires de revancha contra Alajuelense?
No. Tengo frases que digo todo el tiempo, como gente que dice que la Liga es injusta, que un equipo es injusto, pero ni la Liga ni los equipos son injustos, más bien hay personas injustas. Entonces no tengo revancha con una afición que me apoya incluso hoy en día. Sería injusto irse contra una afición que siempre me ha apoyado o contra el club que tanto me ha dado.
–¿Podemos decir que a Jicaral se le ve la mano del Chunche?
Al principio me costó un montón porque era un equipo que ya estaba formado, que tenía una estructura y una forma de jugar. El cuerpo técnico empezó con una metodología nueva y poco a poco lo fueron entendiendo, lo preocupante fue que tuvimos 16 jugadores con covid, diez, doce días alejados y no los conocía, ni ellos a mí. Apenas los vi en dos partidos amistosos. Ahora los hemos ido conociendo y creo que han entendido la cosa. Es fundamental hacer las cosas como un equipo, no tenemos grandes estrellas, ni renombre, por eso apuntamos a trabajar como un equipo.
–¿Cómo hizo para convencerlos?
Es de las partes más difíciles que hay, porque usted tiene que sacarle el máximo provecho a cada ser humano, entonces, hay que conocerlos. Hablando con ellos individualmente, haciéndoles ver lo que pueden aportar al equipo, convencerlos de que somos un equipo y que nos necesitamos todos, convencerse de que el compañero que está a la par yo lo puedo afectar.
–El empate contra Herediano es una inyección de motivación...
Claro, uno lo palpa y lo siente como entrenador. Sentía que podíamos empatar y buscar más, para nosotros es un punto de oro. Si vio, los cambios de Heredia eran como los de una selección y yo tenía muchachos que ni han jugado. Mi esposa fue al estadio y se sentó a la par de la esposa de un jugador del Team y ella le decía, ‘vea los cambios que va a hacer Jeaustin y vea los de Mauricio’. Es una diferencia grande, pero eso nos da confianza.