Navecitas usadas quedan en el limbo
A partir del 15 de julio, día en que termina el contrato de la empresa española Riteve, podría darse una pausa en la entrega de certificaciones de carros importados usados, por lo que los vendedores se atrasarían en la colocación de esos vehículos en el mercado.
Actualmente Riteve chequea esos carros para confirmar que son seguros para quienes los compran, pero con la salida de la empresa no habría nadie que garantice que están en buen estado.
El ministro de Obras Públicas y Transportes, Luis Amador, dijo que están agilizado lo más que pueden el proceso de contratación de la nueva empresa para que la pausa sea lo más corta posible.
“Estamos tratando de que el proceso salga más o menos en quince días, mientras presentan ofertas, eso nos lleva casi al 15 de julio que es la fecha en la que Riteve tiene que entregar los activos y se acaba el contrato; después ocupamos como diez días para poder valorar lo que han presentado las diferentes empresas y después de eso ya lo podemos dar”, manifestó.
Dos meses. Debido a eso es que las fechas de las revisiones de vehículos de la población en general se aplazarán por dos meses.
“Los dos meses es como un plazo máximo, estamos esperando que no sea tanto. A los vehículos nuevos evidentemente casi que de inmediato podemos otorgarlos, el problema son los carros usados que están ingresando al país y ahí sí va a haber una pausa, si es que nos atrasamos y no podemos entrar el 15 de julio.
“Sería irresponsable dar de acto una certificación a un vehículo que viene llegando al país y no sabemos en qué condiciones está, esa es la verdad”, aseguró el ministro Amador.