SUPERCOPA MERENGUE
El Real Madrid inició su temporada oficial de la mejor manera, proclamándose campeón de la Súpercopa de Europa por quinta vez en su historia, al superar 2-0 al Eintracht de Fráncfort, este miércoles en el estadio Olímpico de Helsinki, en Finlandia.
El austríaco David Alaba (minuto 37) abrió el camino para el campeón de España y de Europa. En la segunda mitad, el francés Karim Benzema sentenció, al 65 .
El camino al sextete, el pleno de seis títulos al que aspira el Real Madrid esta temporada, arrancó muy bien para el equipo de Carlo Ancelotti, que hizo historia además al convertirse en el entrenador con más títulos en la Supercopa europea, con cuatro, dejando atrás la igualdad a tres que mantenía con Josep Guardiola.
Ancelotti rindió además homenaje en este partido al equipo que ganó en mayo la decimocuarta Champions en París, repitiendo en la capital finlandesa el once inicial de aquel partido.
“Nos ayuda el buen ambiente que tenemos, para tener mejor resultado y mejor juego. El ambiente que tenemos es muy bueno. Ganar ayuda además a motivarnos”, afirmó Ancelotti.
El Eintracht, 62 años después de ser derrotado 7-3 por el Real Madrid en la final de la Copa de Europa - actual Liga de Campeones-, volvió a estrellase ante el mismo rival, aunque esta vez sin un resultado tan escandaloso.
Benzema, suma y sigue. Fue el Eintracht el que dio los primeros sustos de la final, con sendos contragolpes que terminaron con Thibaut Courtois repeliendo disparos peligrosos del danés Jesper Lindstrom, al 12 y del japonés Daichi Kamada, dos minutos después.
El Real Madrid reaccionó y en el 17 tuvo su primera ocasión, con un balón que Benzema regaló en el área a Vinicius Jr, cuyo disparo superó al arquero Kevin Trapp pero, bajo palos, el defensor Tuta evitó el tanto de su compatriota brasileño.
En el 37, Vinicius rozó de nuevo el gol, con un tiro raso cruzado que Trapp tocó lo justo para enviar a saque de esquina.
En ese córner llegó el 1 a 0: Benzema tocó de cabeza y Casemiro, sin ángulo, retrasó también de cabeza hacia el centro del área pequeña, donde Alaba remató a placer.
“Este club vive de los títulos, así que es importante comenzar ganando un título. Es una victoria merecida.
“Jugar en el Real Madrid siempre te obliga a ganar todo, a entregarte al máximo. Es lo mínimo que se puede pedir, la entrega, por toda nuestra gente”, afirmó Casemiro.
En la segunda parte, el Real Madrid siguió llegando con peligro.
En el 55, Trapp salvó a los suyos ante un disparo de Vinicius y en el 61 Casemiro, elegido luego el mejor jugador del partido, estrelló el esférico en el larguero, desde fuera del área.
La mejor ocasión del Eintracht para empatar la tuvo Ansgar Knauff, en el 64, con un intento en el área que Courtois, muy atento, detuvo sin excesivas complicaciones.
Pero las esperanzas de los alemanes se diluyeron en el 65, cuando un pase de Vini para Benzema terminó en gol del francés, cuyo disparo pasó bajo el brazo de Trapp.
“Es un jugador muy importante, un líder de este equipo. Ha marcado muchos goles, ha acabado bien la temporada y ahora va por el Balón de Oro”, señaló Ancelotti sobre Benzema.
Pese a que el Eintracht sacó del banquillo a sus nuevos fichajes (Mario Götze, Randal Kolo Muani, Lucas Alario) para la última hora, la misión estaba ya muy difícil.
El Real Madrid durmió el partido y el marcador ya no se movió.
Con la misión cumplida en Helsinki, el Real Madrid iniciará el domingo la defensa de su título en la Liga española, visitando al recién ascendido Almería.