Proteína premium para tu bebé
La infancia es un período de vida crítico para establecer adecuados hábitos nutricionales y lograr un desarrollo sano. Elegir una alimentación con proteína de alta calidad y componentes adicionales es vital para el adecuado desarrollo de tu hijo.
Durante los primeros seis meses de vida, la leche materna es insuperable ya que cubre todas las necesidades nutricionales de tu hijo, además de brindarle lazos afectivos y emocionales imprescindibles. Después de esa edad, necesitan complementar su alimentación para obtener una fuente adicional de proteína y otros nutrientes. Ese momento suele coincidir también con el reacomodo paulatino de tu rutina laboral y, por lo tanto, elegir muy bien los alimentos con los que complementarás la nutrición de tu pequeño se vuelve un asunto prioritario.
Es importante que contenga proteínas de calidad o alto valor biológico, que son aquellas que el cuerpo no produce y necesita adquirir de los alimentos, que además son fáciles de digerir. Una fuente rica en proteína es la leche, sin embargo, la leche de vaca no es adecuada para niños en edades tempranas ya que puede traer complicaciones a largo plazo.
Las proteínas son las sustancias nutritivas que más funciones desempeñan en el organismo. Se encuentran entre los 3 principales macronutrientes, base para el crecimiento y desarrollo de órganos como cerebro, corazón, pulmones, hueso y piel, entre otros. Son los “ladrillos” que forman las columnas de la estructura corporal y ayudan en la reparación y mantenimiento de los tejidos dañados.
Además, contribuyen con la absorción y reparación de otros nutrientes, transportan oxígeno y aumentan las defensas. Un consumo deficitario puede desencadenar alteraciones como sobrepeso u obesidad, entre otros.
Por otra parte, los alimentos que contienen fermentos lácticos son eficaces para mejorar el bienestar digestivo e immunológico.
Si tienes dudas, siempre puedes pregúntale a tu pediatra, él te asesorará sobre la mejor nutrición para tu bebé.
LOS NIÑOS PEQUEÑOS REQUIEREN UNA MAYOR CANTIDAD DE PROTEÍNAS POR CADA KILO DE PESO EN COMPARACIÓN A LOS ADULTOS, DEBIDO A SU CRECIMIENTO ACELERADO Y PARA EL MANTENIMIENTO DE SUS ÓRGANOS Y TEJIDOS.