Lissa Barquero
“Los blogueros somos la pieza que faltaba entre la publicidad de moda y el consumidor”
Hablar de Lissa Barquero o de The 5th Paradise viene a ser casi sinónimo. Leer este blog de moda es como conocer un poco de la personalidad de esta joven que a sus 24 años decidió dedicar toda su energía a un proyecto de moda liderado y pensado por ella misma.
Barquero es publicista de profesión pero amante del buen estilo y la escritura. De pequeña, afirma, no dejaba de leer ni una sola revista de moda con tal de dar consejos a su madre y nutrir sus deseos de combinar y experimentar con vestidos, enaguas, pantalones y pinturas.
Ahora, unos 15 años más tarde, afirma que ha decidido trabajar en lo que ama y hacer del blog The 5th Paradise un proyecto sólido al que le vaticina un buen futuro.
Este espacio ubicado en la nube cuenta con dos años de vida, acompañados de éxito. Inició como una propuesta de Barquero para expresar su pasión por la moda. Durante sus primeros seis meses las marchas eran lentas, su tiempo lo tenía que compartir con su trabajo como diseñadora gráfica para una revista de moda.
“Además de mis conocimientos de diseño y publicidad, el estar al día con el tema de moda me ayudó a darle una cara más marcada al blog. Comencé con un poco de miedo, no sabía cuál iba a ser la aceptación. El nicho o la necesidad de este tipo de contenido estaba, a la gente le gustó bastante y me han recibido muy bien”, comentó.
Para Lissa, la inserción de la moda en Costa Rica ha sido lenta, pero viene en aumento lo que afirma le ha dado espacio a los blogueros como punto medio entre la publicidad de moda y el consumidor real.
Mantener un blog no es cosa fácil. Según cuenta es quizá más demandante que un empleo de ocho horas diarias. Se requiere de búsqueda de clientes, productos, reuniones y asistir constantemente a eventos. “Claro que es un trabajo. Es el que yo escogí”.
Lo que afirma sí llegó con el tiempo fue su target, este se acercó como llegan las amigas, sin avisar pero con estrechos lazos, ahora la retroalimentación es diaria y constante.
Recomendar un producto, un atuendo o un destino es parte de la esencia de este blog. Pero de forma natural, sin trauma alguno, sin una publicidad evidente. Casi como el boca a boca.
“El hecho de recomendar un atuendo para una actividad ya es publicidad pero sin necesidad de mencionarlo como tal, es una recomendación. Es como cuando una amiga te pregunta y ese pantalón donde lo consiguió... o esos zapatos. Esta es la dinámica del día a día de las chicas”, dice.
Por ahora Lissa continuará inyectando pasión y gusto a su hijo digital, una propuesta que garantiza robusta y espera evolucione junto a ella con el paso de los años.