Tosh con más sabor
Según el reporte de la organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OECD, 2008) el 25% de los viajeros consideran la comida en el momento de decidir un viaje, y el 58% está interesado en realizar un viaje gastronómico. Esto ha sido comprobado en países como España, que en el 2015 tuvo 8,4 millones de visitantes motivados por su gastronomía.
Por eso la Cámara Costarricense de Restaurantes (CACORE), en conjunto con la Universidad de Turismo (UTUR), organizó un ciclo de talleres en el cual se contó con la participación del experto mexicano Antonio Montecinos, doctor en Turismo con especialidad en Planificación Gastronómica y Turística por la Universidad Antonio de Nebrija, España.
“Costa Rica es un país que asume el reto de consolidar una gastronomía sostenible, saludable y con identidad, que abarque una amplia oferta, incluyendo lo tradicional y de innovación, como parte fundamental de su modelo de desarrollo, basado en la filosofía del Plan Nacional de la Gastronomía Costarricense y Saludable (PNGCSS)”, destacó Alejandro Madrigal, director ejecutivo de CACORE. Uno de los objetivos de una serie de talleres impartidos recientemente es ayudar a comprender y a reconocer la dimensión de la gastronomía como una motivación principal para realizar un viaje turístico, razón de ser del hecho turístico.
“Lamentablemente, muchos de los prestadores de servicios gastronómicos y turísticos no han evolucionado a la par, por lo que el gran reto es que en Costa Rica, al crear servicios, negocios gastronómicos, rutas (urbanas y rurales), productos y destinos de manera planificada, el turismo gastronómico sea considerado a la brevedad como un producto turístico prioritario, pues incrementa el desplazamiento de visitantes nacionales e internacionales, genera fuentes de trabajo y nuevas oportunidades laborales a los egresados de instituciones académicas especializadas, pero ante todo, beneficios a los prestadores de servicios y comunidades receptoras”.
Lo anterior fue expresado por el Dr. Antonio Montecinos durante uno de los talleres. El Dr. Montecinos también mencionó que la principal problemática que ha inhibido el desarrollo del turismo gastronómico es el crecimiento desordenado y los efectos negativos principalmente para los grupos sociales de la región por falta de un plan, programas y proyectos mínimo a 25 años, por lo que “no puede existir turismo gastronómico sin un sistema de seguridad alimentaria regional sostenible que tenga como prioridad el otorgar beneficios a las comunidades locales con un sistema alimentario que nazca en la tierra y termine en ella”. Antonio Montecinos visitó el país para compartir los logros de México en el campo del turismo gastronómico.