UN VISTAZO A LAS PENSIONES
ADEMÁS DE SER EL SOSTÉN DE MILLONES DE PERSONAS QUE YA CUMPLIERON CON EL NÚMERO DE CUOTAS Y/O LA EDAD PARA PENSIONARSE, LOS FONDOS DE PENSIÓN SON INVERSORES RELEVANTES, PRINCIPALMENTE EN BONOS DE GOBIERNO.
Después de años de duro trabajo, los jubilados esperan contar con dinero suficiente para poder pasar esa etapa de su vida tranquilos, sin mayores preocupaciones, sobre todo si han invertido en planes complementarios de pensiones. Sin embargo, en algunos países más que en otros, la informalidad es alta, lo cual implica también que un importante número de trabajadores nunca ha cotizado para la seguridad social y carecen de previsión para su futuro. En Guatemala solo 8,3% de la población que supera la edad legal de jubilación percibe una pensión de vejez, según el Informe Mundial sobre la Protección Social 2017-2019. Además, aunque a principios del 2019 entró a regir un aumento a la base para el cálculo de las pensiones (pasó de US$777 a US$1.166), el monto promedio que paga el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) por pensionado apenas llega a los US$194 al mes. En el caso de las personas a las que les reportaban ingresos superiores a los US$1.166, la tasa de reemplazo (cuota de pensión que se recibe en relación al salario mensual) es del 80%.
En El Salvador menos del 5% de los jubilados está afiliado al Sistema de Ahorro para Pensionados. Destaca que la recaudación de las cotizaciones previsionales va en alza. En enero de 2020, alcanzó los US$84 millones, mayor en 5,7% respecto al mes anterior, con un incremento interanual de 3,3%. La recaudación acumulada desde inicios de operaciones del Sistema de Ahorro para Pensiones hasta la fecha es de US$10.848 millones, mayor en 9,6% respecto al mismo mes del año anterior.
Dentro del portafolio de inversiones del Fondo Conservador (excluyendo depósitos en cuenta corriente), el 99,8% es renta fija y el 0,2% renta variable, producto de la tenencia de títulos en fondos de inversión.
Retos
En Honduras el trámite para poder acceder a una pensión duraba dos meses y ahora se ha extendido a casi un año por extravío de documentos. El Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) tiene más de 800.000 afiliados, y el techo actual de cotización mensual es de US$376, lo que indica que un pensionado no podría acceder a más de US$300 por mes. En Nicaragua, la crisis sociopolítica que aún vive fue provocada por cambios al régimen de pensiones del país, aunque el gobierno de Ortega dio marcha atrás a los proyectos de ley. Las finanzas del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) atiende a más de 200.000 pensionados y está en estado crítico.
Según la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Fundides), enfrenta serios problemas relacionados con los cambios demográficos, la estructura económica del país y el manejo financiero de la INSS. Adicionalmente, las nuevas pensiones mínimas no logran el ajuste del salario.
En el caso de Costa Rica, la reducción de la tasa de natalidad y mortalidad, junto con el aumento en la expectativa de vida al nacer ha provocado que el número de asegurados directos en el régimen de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) aumente, pero a una tasa decreciente, mientras que la cantidad de pensionados aumenta a una tasa constante (5,5% en promedio) y más alta que la de asegurados. La consecuencia: la cantidad de asegurados por cada pensionado está disminuyendo.
Los ingresos de este régimen se han mantenido relativamente constantes y representan 3,1% del PIB,
en promedio, en tanto que los gastos equivalen al 2,1% del PIB y su participación ha crecido en forma importante. La diferencia de ingresos y gastos se ha venido reduciendo significativamente, lo cual conlleva un menor crecimiento de la reserva. En Panamá también hay un problema estructural en el sistema, administrado por la Caja del Seguro Social (CSS) y se agrava con la estrechez financiera y las presiones económicas que le ha impuesto al país el Covid-19. Al comparar los primeros ocho días de marzo con los primeros ocho de abril, la institución identificó que los aportes en concepto de cuota obrero-patronal se redujeron. En esa franja, la recaudación pasó de US$13,9 millones a US$9 millones. La pandemia afectará a todos los sistemas de la región, que ya de por sí estaban obligados a hacer reformas para poder resistir a los cambios de demografía y de la economía en sus respectivas sociedades.