Aniversario 60 de una emisora insignia
RR devino cronista de las hazañas de los insurrectos en el macizo montañoso suroriental del archipiélago, y tras el triunfo de estos, el 1.º de enero de 1959, es bastión de la inmediatez periodística, vivo reflejo de la lucha antimperialista de los cubanos, de nuestros triunfos, hazañas y reveses, amén de ser voz principal de infinidad de eventos deportivos nacionales e internacionales, y constituir asimismo ameno y justo reflejo del protagónico quehacer de figuras del arte y la cultura, las ciencias, la historia, la educación y la salud, entre otros. Durante las 24 horas del día su actual programación abierta, con seis revistas en vivo, la han hecho acreedora del respeto de los radioescuchas que siempre han creído en ella.
Aquella primera planta radió desde diferentes puntos de la serranía. Disponía, como base técnica, de un transmisor de la marca Collins, modelo 32-V-2, de mediana potencia, de unos 120-130 watts, asistido por un equipo generador de electricidad marca Onan, con un kilowatt de potencia, que también brindaba energía a un tocadiscos y un bombillo, RR cuenta hoy con una capacidad de potencia instalada de 891 kilowatts, con 44 transmisores para una cobertura del 98 % de todo el país.
En la contemporaneidad definida por nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones, entre ellas la expansión de Internet, los 274 trabajadores que laboran en las instalaciones de RR emprenden varios proyectos de actualización. Periodistas, locutores, actores, directores de programas, técnicos de sonido y audio se han propuesto hacer una radio cada vez mejor, en la que al sonido han incorporado videos, textos y fotografías.
De tal modo, su señal —radiofónica y digital— se registra hoy, incluso, en apartados rincones del planeta, a los que llega nuestra cotidianidad, enriquecida por los aportes de las corresponsalías existentes en cada una de las provincias del país y el municipio especial de Isla de la Juventud.
Con gran certeza, el querido Comandante en Jefe expresó el 24 de febrero de 1994: “Hoy debemos ver toda la radio del país como una gran Radio Rebelde; como cuando en la época final de la guerra teníamos estaciones de radio por todas partes; todas cooperando entre sí, ayudándose mutuamente, constituían una cadena que desempeñaba un papel fundamental”.