Jinete Chullima: regalo de y para Eusebio
de 195 estudiantes de los grados 7.°, 8.° y 9.°, con un completamiento de la cobertura docente, que en este caso conforman 28 PGI, algunos también fundadores de este revolucionario programa, que otorgó gran importancia a la atención directa y diferenciada de los adolescentes y al vínculo comunidad-escuela para llevar a cabo los objetivos formativos.
Fue precisamente el reclamo de la comunidad lo que más incentivó la reapertura de la instalación, y hoy allí se aprecian alegría y felicidad, pues ya los alumnos tienen la posibilidad de estudiar cerca de sus hogares. Así lo ratificaron John Xavier Isaac Bárcena, de 9.° grado y Emilé Nachel Medina Acosta, de 7.°, jefa del destacamento pioneril, quienes aspiran a formarse como profesionales luego de ingresar al preuniversitario.
Entre los propósitos de Nerkis Mariela como directora del centro se encuentra la formación vocacional y orientación profesional “para que los niños sientan qué significa ser maestro, ese sentido de pertenencia y de dar clases que tanto los emociona.
“Me he propuesto este fin para lograr que los docentes en un momento determinado sean de la propia capital, y con ello ahorrarle recursos al país, teniendo en cuenta que nuestro claustro proviene de las provincias orientales. Es un sueño que voy a hacer realidad, porque sí podemos incentivar en los educandos el amor por las carreras pedagógicas a partir de nuestro ejemplo y desempeño profesional”.
Entonces, bien pudiera hablarse de Jinete Chullima como lo dice la canción de Silvio Rodríguez: Esta es la nueva escuela, esta es la nueva casa: casa y escuela nuevas como cuna de nueva raza.
*Para los coreanos es un símbolo de energía, voluntad, fuerza y tesón. Está representado por un caballo guiado por un jinete. Es un movimiento que surgió en medio de la tarea de la construcción socialista en ese país.