Cuba se crece
Participa el Presidente cubano, Miguel Díaz-canel Bermúdez, en la Jornada Nacional de Trabajo Voluntario en La Habana, para restañar daños del huracán Ian. Estuvo acompañado por los miembros del Buró Político Roberto Morales Ojeda, secretario de Organización del Comité Central, y Ulises Guilarte De Nacimiento, secretario general de la CTC
Con la presencia del Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República Miguel Díaz-canel Bermúdez, y por otros miembros del Buró Político del Partido, un nutrido grupo de trabajadores y jóvenes de muy diversos sectores, en especial del llamado Polo Científico, estudiantes de la Universidad de Ciencias Informáticas (UCI), combatientes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y residentes del lugar, convocados para el barrio Fraga, en el municipio capitalino de La Lisa, dedicaron la mañana del domingo a combatir los estragos del reciente huracán.
Junto a ellos trabajó Ulises Guilarte De Nacimiento, miembro del Buró Político y del Consejo de Estado y el secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba. Su presencia ratificó el propósito de la dirección del movimiento sindical de mantener este tipo de jornadas voluntarias en lo que queda de año, como una manera de impulsar las tareas de recuperación y las labores esenciales de la economía nacional.
Con las experiencias vividas este domingo podría afirmarse que Cuba se crece en medio de la adversidad.
El saneamiento de la zona, específicamente la recogida de ramas y arbustos caídos por la fuerza del fenómeno natural que sacudió una extensa porción de Cuba en la madrugada del pasado 27 de septiembre, constituyó una de las tareas priorizadas en la Jornada Nacional de Trabajo Voluntario también convocada para homenajear al Guerrillero Heroico a 55 años de su caída en combate.
En esta Jornada primó el trabajo, pero no faltó la música, la poesía y el fervor revolucionario, todo en un ambiente fraternal, y coronado por un intercambio informal y verdadero, que sirvió de igual modo para el recuento de cuanto se ha hecho en la capital y en otros territorios luego del paso de Ian.
Allí brindaron su esfuerzo creadores de las vacunas cubanas contra la COVID-19, los que laboran en el IPK, y otros de nuestros científicos. Y sobresalió Dagmar García Rivera, quien no estaba allí como Heroína del Trabajo de la República de Cuba, sino como vecina del lugar.
Como tal habló, se refirió al esfuerzo que en esa comunidad se ejecutaba, y expuso los temas que preocupan a sus pobladores.
“Estamos aquí porque confiamos en ustedes, y para que ustedes sepan que pueden confiar en nosotros… y vamos a seguir dándolo todo por la salud, porque nadie nos va a dar nada, todo será por nosotros mismos”, dijo con sentimiento a Díaz-canel otra mujer, doctora por demás, y vecina igualmente de Fraga.
En la voz de Luis Antonio Torres Iríbar, primer secretario del Partido en La Habana, se escuchó el recuento de lo realizado en esta provincia y el compromiso que aún falta para saludar creativamente los próximos aniversarios del triunfo de la Revolución y de la fundación de la capital de todos los cubanos.
En cada palabra de los reunidos se sintió el orgullo por compartir el sudor del trabajo, y las palabras del Presidente Díaz-canel, quien recordó la figura del Che, uno de los que más hizo por el trabajo voluntario, “que está presente y no hemos renunciado al ideal de formar al hombre nuevo aun en medio de la compleja situación que vive el país”, precisó.
Destacó que cada vez debemos estar más preparados para enfrentar los huracanes, cuyos efectos continuarán incrementándose como consecuencia del cambio climático.
Puntualizó que lo que el huracán destruye rápidamente nosotros necesitamos mucho tiempo para recuperarnos. Además, agregó que es lógico que bastante gente se preocupe y se desespere con la falta del servicio electroenergético “por la incidencia en otras esferas como la falta de agua.
“Hay daños dejados por el huracán que no se pueden resolver de inmediato. Hay brigadas que están trabajando casi 24 horas en las afectaciones eléctricas”, subrayó.
Se refirió también a los efectos del ciclón en las viviendas, las que, manifestó, son las que más tiempo llevan para su solución, y significó el trabajo hecho hoy en la higienización, algo que hay que realizar pronto tras el fenómeno natural. “Eso multiplica la esperanza, la capacidad que tenemos de resistir”, precisó.
Calificó de heroico haber eliminado en la capital en cinco días los daños al servicio eléctrico dijo: “Y es una heroicidad que tiene rostros y son esos linieros que llegaron aquí de diversas partes del país. Y que después se incorporaron a Artemisa y luego a Pinar del Río”.