Con los brazos se puede abrir la selva
Puede que con los brazos/ haya que abrir la selva/ pero a pesar de los pesares/ como sea, ¡Cuba Va!
Así puede afirmarse de la Jornada Nacional de Trabajo Voluntario de este fin de semana, destinada a sumar un impulso más al enfrentamiento a los daños ocasionados por el huracán Ian y a priorizar tareas esenciales de la economía, porque en cada rincón de nuestra geografía los buenos cubanos, protagonistas de este esfuerzo, no se dejan vencer por las dificultades.
Trabajadores de la empresa Pecuaria Genética El Cangre, del municipio de Güines, en la provincia de Mayabeque, acudieron en apoyo a la recuperación de Pinar del Río. Laboraron en la reconstrucción de las instalaciones de la Empresa Camilo Cienfuegos, del mismo ramo, y realizaron una feria agropecuaria para contribuir a la alimentación de los damnificados.
En Matanzas la prioridad siguen siendo labores recuperativas de la Base de Supertanqueros, donde se continúa la demolición de los cuatro tanques destruidos por el incendio ocurrido el pasado mes de agosto. Se laboró también en la producción de alimentos, la campaña agrícola de frío, la preparación de la zafra azucarera, la lucha antivectorial y el saneamiento de las ciudades y áreas rurales.
La finca El Majagual, en el municipio de Las Tunas, fue sede de la actividad central desarrollada en la provincia homónima después de concluir acciones de chapea y deshierbe en áreas de diferentes cultivos.
Corte de caña en zonas de Cacocum, en la oriental provincia de Holguín, limpieza de organopónicos en Moa, siembra de boniato en Mayarí y de frijoles en Gibara, el acopio de café en Sagua de Tánamo, y la intensa recogida de desechos sólidos en varias manzanas y arterias del Consejo Popular Alex Urquiola movilizó a una gran parte de los trabajadores.
Los cienfuegueros se volcaron a la siembra de caña de frío y la correspondiente a igual etapa en las entidades de la agricultura; además de la reparación de los centrales y equipos que intervendrán en la cosecha, entre otras tareas.
La recogida de café en pleno pico de maduración resultó favorecida en El Ramón, Santiago de Cuba, y en municipios con importantes macizos cafetaleros como Guamá, San Luis, Segundo Frente y Tercer Frente.
Los villaclareños laboraron en el organopónico La Riviera, donde cosecharon productos, escardaron sembrados y acondicionaron cámaras que serán puestas en producción próximamente. Además el Sindicato de Trabajadores Azucareros realizó diferentes acciones en la Casa Natal de Jesús Menéndez, líder del sindicalismo cubano, como parte también del aniversario 90 de la fundación de ese sindicato. Asimismo se trabajó en la Industria Nacional Productora de Utensilios Domésticos (Inpud), colectivo que tiene el privilegio de ser una de las fábricas que creó el Che en la región central de Cuba en la década de los sesenta del pasado siglo.
En Ciego de Ávila se dedicaron a las reparaciones de la maquinaria agroindustrial con vistas a la próxima zafra azucarera, la producción de alimentos, la higienización en centros laborales y la remodelación de instalaciones económicas y sociales.
La jornada con carácter provincial en Sancti Spíritus se efectuó en el organopónico Celia Sánchez —conocido como El Gigante— de la ciudad del Yayabo. Con gran simbolismo, en Fomento, territorio donde el Che instaló su campamento guerrillero y permaneció 63 días en los preparativos y las acciones finales de la lucha armada revolucionaria, las faenas se encaminaron a apoyar el programa cafetalero.
La siembra de yuca en las áreas de la UBPC Combate de Pacheco, en Jimaguayú, Camagüey y en la UEB Los Toros en Vertientes; de plátanos en Sibanicú; de boniato en la finca Tayabito; de caña en Esmeralda; así como la limpieza de hectáreas sembradas con diversas producciones, fueron de las actividades que matizaron la jornada.
Son estas algunas muestras del gran empeño productivo efectuado en todo el país como homenaje al Che Guevara, promotor del trabajo voluntario.