Código de las Familias: Mes #1
La arrancada y el aprendizaje en los nuevos trámites que empiezan a hacer realidad las bondades del Código de las Familias caracterizaron los primeros 30 días desde la entrada en vigor de esa norma, según informaron a autoridades del Ministerio de Justicia (Minjus).
Pilar Alicia Varona Estrada, viceministra de ese organismo, recordó que el 27 de septiembre se publicó en la Gaceta Oficial la Ley 156 del Código de las Familias, dos Resoluciones del Minjus (492 y 493) con modificaciones a la Ley del Registro del Estado Civil y para establecer el procedimiento para el divorcio notarial de mutuo acuerdo respectivamente; así como la indicación metodológica no.3 de la Dirección General de Notaría y Registros Públicos (DGNRP).
A partir de ese momento ha habido un intenso trabajo de capacitación y conciliación con todos los organismos involucrados en la implementación de estas legislaciones. La habilitación de canales de comunicación internos con todos los notarios y registradores para la recepción y respuesta a consultas técnicas, así como correos electrónicos para las dudas de la población en el nivel nacional y las direcciones provinciales de Justicia, fueron algunas de las medidas más inmediatas, añadió la funcionaria.
Olga Lidia Pérez Díaz, directora general de Notarías y Registros Públicos, amplió que entre los aspectos que más interés suscitan están, por ejemplo, la delegación voluntaria de la responsabilidad parental o parte de su ejercicio, la aplicación práctica de los artículos sobre el asentimiento de un cónyuge para que el otro pueda vender o donar un bien, los términos y contenidos de los pactos matrimoniales en sus tres modalidades de comunidad o separación de bienes, y
Trabajadores
régimen mixto, entre otras novedades.
“Nos habíamos preparado para una demanda mayor. Todavía la población está en una etapa de consultar, esclarecerse, pero creo que lo estamos haciendo bien”, valoró la directora de la DGNRP.
“En cuanto al matrimonio, se han disparado durante el mes de octubre con unos 3 mil 300 matrimonios, de ellos 75 entre personas del mismo género, que representan un 2.27 % del total”, ilustró.
Está el caso de una pareja en Matanzas que tuvo un bebé y optó por inscribirlo con el apellido de la madre en primer lugar. “Todos estos cambios tomarán su nivel en la medida que las personas tengan más dominio del Código”, concluyó.
“De manera autocrítica debemos reconocer, no obstante, que todavía nos falta más preparación del personal. Esta Ley tiene que ser el libro de cabecera de nuestros profesionales, porque el Código de las Familias regula muchas figuras jurídicas, no pocas de ellas completamente nuevas”, admitió, al insistir en la importancia del modelo de conducta y actuación de notarios y registradores, en una materia de gran sensibilidad donde cada caso es diferente.