Diario Libre (Republica Dominicana)
DOCUMENTAL DE DIARIO LIBRE IRÁ A LA ONU
El documental, producido por Diario Libre, narra la evolución de cinco pescadores de Manresa, hoy vigilantes de las tortugas marinas
El documental “Cacú, un cambio por la vida”, que registra la transición de cinco pescadores de Manresa que se dedicaban a la caza y a la comercialización de carne y huevos de tortugas marinas al conservacionismo, se presentará en la sede de la Organización Naciones Unidas (ONU) en la ciudad de Nueva York el miércoles 23 de mayo, Día Mundial de la Tortuga Marina. El proyecto, que es una iniciativa del fotoperiodista Marvin del Cid y de la empresa Grupo Diario Libre, demuestra que la situación de pobreza de una comunidad es irrelevante cuando se tiene el compromiso de sensibilizar en favor de la conservación de los recursos naturales y de especies en peligro de extinción, un prejuicio que, confiesa Del Cid, director y guionista de Cacú, le acompañó hasta conocer la labor de los protagonistas de esta historia: el biólogo marino Omar Shamir Reynoso y los pescadores Ramón Alberto Pérez (Cacú), Ramón de los Santos, Guillermo Méndez (Canita), Marcial Jiménez, Heyri Benjamín Galán y Mariano Encarnación (Vakeró). Fue en el año 2013 cuando Del Cid y Reynoso se conocieron de la mano de la investigadora y también bióloga marina, Yolanda León. “Ese día salió una tortuga en Güibia, era una tortuga Verde. Yolanda me invitó a ver el evento y me animé a escribir sobre aquello para el periódico. Ahí conocí a Omar, que me invitó a Manresa a conocer un programa que apenas comenzaba en ese lugar”, cuenta Marvin del Cid.
La denuncia que cambió la suerte de las tortugas de Manresa
Omar Shamir Reynoso visitó por primera vez Manresa en el año 2013 por una denuncia que recibió el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, donde laboraba: los pescadores de esa zona saqueaban los huevos de las tortugas que allí anidaban. Le fue asignada la tarea de confirmar la veracidad de esa denuncia y levantar información de campo. Al comprobar lo que sucedía, el Ministerio ejecutó una serie medidas coercitivas que sólo surtieron efecto en el corto plazo. Es entonces cuando Reynoso decide cambiar la estrategia. “Entendimos que las tortugas lo que necesitaban era un aliado local, que estuviera para ellas las 24 horas del día y les garantizara la protección adecuada. Así nos unimos y sacamos adelante el proyecto”, explicó. Cuando Del Cid se interesó por el proyecto, los pescadores ya habían recuperado el quinto nido de tortuga avistado desde la referida denuncia en ese litoral. “Recuerdo que escribí un primer artículo sobre la recuperación de ese quinto nido y dos meses después, el de la liberación de las pequeñas tortugas”, narró. Transcurrió un año y continuó participando del proyecto sin darse cuenta de que en ese período había recopilado los recursos para realizar uno de sus más anhelados sueños: hacer una película o un documental. El periodista planteó su historia a los ejecutivos de Diario Libre y su idea fue aceptada sin haber tenido experiencia previa en largometrajes. “Ese apoyo hizo posible que hoy, cinco años después, tengamos la historia de estos hombres que me rodean aquí”, dijo, regocijado, antes de informales que el audiovisual, que conoció su primera muestra internacional el 19 de marzo en la Noche Dominicana del Festival de Cine Medioambiental de Washington D.C. se presentará también en la sede de la ONU el próximo miércoles. “La crítica de Washington D.C. fue bastante buena y me hizo sentir seguro del producto. En base a esa experiencia y al hecho de que se haya empezado a difundir esta historia es que vamos ahora a Naciones Unidas invitados por la Global Foundation Democracy and Development (GFDD) y la Muestra de Cine Medioambiental Dominicana (DREFF, por sus siglas en inglés)”, manifestó.
Un salto al vacío
Marvin del Cid reconoce que el proyecto fue un salto al vacío. No tenía garantías de su sostenibilidad en el tiempo. “Empezar a documentar algo que no sabíamos a dónde llegaría, fue uno de los desafíos más grandes que enfrentamos. Esto no habría sido posible sin el acompañamiento permanente de Omar”, expuso durante la entrevista. Con la llegada de este material a la ONU, el fotoperiodista espera que el mundo conozca el trabajo de la comunidad de Manresa y sus pescadores. “El proyecto se inició con ellos cinco, pero hoy está toda la comunidad involucrada”, expresó Del Cid. La experiencia de su primer largometraje y el reencuentro que ha significado para él con sus orígenes la cotidianidad de Manresa con el lugar donde nació y creció en Ciudad de Guatemala, de donde partió en el año 2003 ‘hacia el porvenir’, lo convirtieron en una especie de biólogo de campo, al que le consta que el cambio de vida por la vida es posible, pues así se replica en los testimonios de los cinco protectores de tortugas que le dan vida al documental.