Diario Libre (Republica Dominicana)
“MEDEA”: UN RELATO TRÁGICO EN LA CASA
SIGUE HOY Y CULMINA MAÑANA 22 DE JULIO
SANTO DOMINGO. La tragedia griega de Eurípides llega a Casa de Teatro en la piel de una destacada actriz, cantante y bailarina puertorriqueña. La veterana del arte Marian Pabón viene a celebrar los 44 años de Casa de Teatro invitada por Freddy Ginebra. Ella está presentando su adaptación de la tragedia “Medea”, escrita y dirigida en conjunto con el teatrista boricua Julio Ramos, que continúa hoy a las 8:30 p.m. y culmina mañana domingo 22 a las 6:30 p.m.
—¿Qué tan fuerte es este relato de la antigua Grecia?
Son 55 minutos de monólogo. Es tan fuerte que no creo que la gente pueda aguantarlo. Esta pieza pasa por distintas tramas. Julio Ramos, el director, lo trabajó de una manera muy inteligente. Por momentos reflejo locura, en otros soy una persona mala y desgraciada… Es una pieza desgarradora, un personaje con muchas altas y bajas.
—¿Se nutrieron de la vida real para adaptarlo?
Sí. Tuve la oportunidad de entrevistar a varias mujeres que están en la cárcel y entre ellas había una mujer que asesinó a su hijo de ocho años. Afirmó haber sido violada por su padre y abandonada por su madre. Tras enfermarse de diabetes y pensar que su hijo sufriría sin ella, lo mató de una sobredosis de insulina.
—¿Qué tan conmovedora puede ser? Hay gente que sale con pena porque ella trata de justificarse y abandona a su familia. Otros la siguen viendo como un monstruo.
— Lo difícil del papel es…
Sus acciones son muy drásticas. De estar llorando a, de repente, mostrar un coraje. La pieza va de un lado a otro, y debe ser creíble.
— Freddy Ginebra es…
Freddy es un hombre muy talentoso. Yo lo considero parte de mi vida. Es de las personas más generosas que he conocido.
—¿Cómo ve el entretenimiento en Puerto Rico?
La gente se está reinven- tando. En teatro se están agrupando los actores para poder producir. Cuando el huracán María todo se canceló por 6 meses. Lo que se hacía era buscar espacios alternativos y se cobraba más barato. No nos hemos recuperado, pero seguimos batallando.
—También hace “Stand Up Comedy”
Sí (risas). Hago la rama del del ‘cuenta cuentos’ desde hace 25 años. Me he presentado en varias ciudades de Estados Unidos. Todo surge porque me gusta contar muchas historias de mi vida. Y a mis amigos les gustaba la manera en que yo las contaba, que siempre resultaba graciosísimo, aunque el caso no lo sea.
—¿Qué le falta por hacer?
Quisiera viajar más con mi trabajo. Eso me va a enriquecer con otras culturas. Ya he hecho de todo en 44 años en el arte. Estoy formada en teatro musical, de modo que puedo animarme si aparece un proyecto.
Casa de Teatro. Hoy, 8:30 p.m. 22 de julio, 6:30 p.m. RD$700. SANTO DOMINGO. La crítica social se expone nuevamente en el teatro. En esta ocasión trata sobre tres mujeres que van a escenificar los retos y prejuicios de su género. “Ni princesas ni esclavas” se estrenó el 19 y culmina hoy 21 de julio en el bar Bar Juan Lockward del Teatro Nacional a las 9:30 p.m.
Los roles son personificados por las comunicadoras Yezmin Cabrera (Patricia), Violeta Ramírez (Juanita) y la actriz Natalia Abreu (Thelma María) bajo la dirección de Jennie Guzmán.
Tiempo Libre conversó con el dramaturgo mexicano Humberto Robles, autor de la obra que se ha exhibido en nueve países. Desde México envió mayores detalles de la pieza que invita a reflexionar.
—¿A qué se dedican las mujeres en la obra? Una es ama de casa tradicional, la otra es trabajadora sexual y la tercera es una mujer profesional de clase acomodada. En la segunda parte de la obra cada una sufre cambios y transforman su actividad así como la óptica de su antigua y actual situación.
—¿De cuáles frustraciones, limitaciones e imposiciones se habla? Cada mujer cuenta su propia historia muy particular. A partir de esto se refieren a la violencia doméstica, al machismo aceptado como algo “normal” en nuestra sociedad, se habla de inequidad, de insatisfacción y de la falta de educación sexual. Se habla del universo femenino en un mundo con un sistema patriarcal.
—La pieza llama al empoderamiento de la mujer? ¿Es feminista?
Yo me considero feminista, así que quizás el texto también lo sea. Lo que quise hacer con este libreto es mostrar la situación de muchas mujeres de distintos estratos sociales; una crítica al machismo y al patriarcado, del cual todos somos víctimas e incluso a veces victimarios. Se invita al respeto y a la equidad de género. —Qué reflexión tiene del rol de la mujer en la sociedad? Afortunadamente, el movimiento feminista ha tomado un gran impulso y ha alcanzado varios logros, pero aún falta mucho. Corresponde a mujeres y hombres garantizar su seguridad; el derecho a decidir sobre sus cuerpos, el derecho a vivir una vida libre de violencia, a recibir educación, salarios justos, que no haya ni un feminicidio más y apoyar a los LGBT. A todos nos toca luchar contra los opresores, que son el machismo, el Estado y la Iglesia. A las mujeres les toca esta lucha y a los hombres apoyarlas y acompañarlas en sus justas demandas para alcanzar la equidad.
—¿Por qué el público no debe perderse esta obra? Porque se sentirán identificados con estas mujeres o conocerán a a alguien que es como alguno de estos personajes. Se reirán y pasarán un momento muy divertido que al final invita al discernimiento. Algunos de los ingredientes son la crítica social, el humor inteligente con una dosis de picardía y la farsa.
Bar Juan Lockward del Teatro Nacional. 9:30 p.m. RD$560.