Diario Libre (Republica Dominicana)
EN BUSCA DEL ADN DE LAS BALLENAS
● Científicos tomaron muestras en la bahía de Samaná ● De 10 expediciones la de RD ha sido la más exitosa
SAMANÁ. Son las 6 de la mañana y un grupo multidisciplinario de diez personas aborda un bote en la bahía de Samaná, mientras la temporada de avistamiento de ballenas jorobadas está en su pico más alto. Es su décima expedición en siete países alrededor del mundo.
Cada día, desde el 26 de febrero hasta el 11 de marzo, un grupo de científicos y técnicos trabajó desde tempranas horas de la mañana en busca de un tesoro biológico contenido en la exhalación de las ballenas.
¿Qué es Snotbot?
Es un programa de Ocean Alliance, que comenzó en 2013, en un principio con drones construidos junto con Olin College of Engineering. Desde la primera expedición, la organización Parley for the Oceans ha sido uno de sus socios principales y el programa se ha ejecutado junto con ellos.
Snotbot consiste ahora en drones comerciales modificados, DJI Inspire y Mavick, que vuelan a través del soplo de una ballena y recoge “mocos” exhalados en placas de Petri. Este soplo contiene un tesoro de valiosa información biológica: ADN, hormonas del estrés y del embarazo, microbiomas y potencialmente muchos otros compuestos indicadores biológicos de la salud y ecología del animal.
Un dato importante es que esta es una herramienta no invasiva, más segura para los animales, más barata y más efectiva para el usuario.
La técnica consiste en ubicar ballenas, subir un dron modificado para poder tomar las muestras en placas de Petri y siguiendo el movimiento natural de las ballenas, esperar sobre ellas el soplo cuando salen a la superficie para respirar. Luego el dron regresa al bote y las muestras son clasificadas y almacenadas para ser analizadas en tierra.
Además de las muestras, con el dron se logran imágenes de alta calidad desde una perspectiva única, que además sirven para estudiar el comportamiento de estos animales.
En la expedición a República Dominicana se tomaron 80 muestras, siendo la expedición más fructífera hasta ahora.
Para el Dr. Iain Kerr, ejfe de la expedición, el uso de drones ha democratizado el uso de estos instrumentos en la ciencia, sin interferir en el comportamiento de las ballenas. En cientos de vuelos sobre ellas, solo han podido documentar unas pocas reacciones a la presencia del dron.
El uso de drones en áreas protegidas y con animales marinos está regulado por las autoridades. ●