Diario Libre (Republica Dominicana)
Tito Pereyra, presidente Fedobe, falleció ayer.
El cadáver de Tito será sepultado mañana en Santiago
SANTO DOMINGO. Ni lanzaba, ni bateaba, ni tomaba rodados, pero tras cada fracaso de una novena dominicana en la arena internacional era adonde apuntaban la mayor cuota de responsabilidad. Sin embargo, su enorme capacidad para gestionar crisis sin entrar en descalificaciones personales vencía hasta a sus más fieros críticos.
Héctor “Tito” Pereyra (Santiago, 1960) era dueño de una oratoria envidiable, de una sonrisa pronunciada con la que convencía al más incrédulo y una capacidad sorprendente para someter a sus rivales. De ahí se explica que presidió la Federación Dominicana de Béisbol por 26 años y para su más reciente elección (2018) recibió el voto unánime de 32 asociaciones.
Pereyra, que falleció la noche del jueves en su hogar de Santiago a causa de un paro miocardio lidiando con un cáncer de estómago que le fue descubierto recientemente, topó la cúspide de su presidencia cuando coordinó el equipo dominicano que ganó el Clásico Mundial de Béisbol en 2013.
Contador de profesión, dirigente político (PLD),
ensayista, poeta, Pereyra trepó al máximo asiento internacional con la presidencia de la Confederación Panamericana de Béisbol (Copabe) y estaba envuelto en la estructuración del equipo dominicano que busca clasificarse a los Juegos Olímpicos de Tokio, con el equipo clasificado al Premier 12.
Deja en la viudez a Vivian Núñez y en la orfandad a Paola, Héctor, Mariel, Pamela, Paula, Soara, Maikol, Camila y Yariel. El próximo lunes cumplía 59 años.
Su cadáver es velado desde la tarde del viernes en la Funeraria Blandino de Santiago y será sepultado este domingo en el cementerio El Ingenio, previo a una misa que dará inicio a las 11 de la mañana.