Diario Libre (Republica Dominicana)
La crisis política haitiana, en punto de bloqueo
La oposición ha hecho caso omiso a los llamamientos de diálogo
La honda crisis política que afecta a Haití y que ha ocasionado protestas diarias desde mediados de septiembre está en un punto de bloqueo de difícil solución.
La oposición ha hecho caso omiso a los llamamientos de diálogo, que han partido de la ONU, de países europeos y de Estados Unidos, mientras se mantenga en el poder el presidente Jovenel Moise, quien se niega a renunciar.
Las protestas y las barricadas, presentes a diario en las calles de Puerto Príncipe, y la creciente actividad de bandas armadas han llevado a la parálisis casi total de las actividades económicas desde hace ocho semanas y han agravado las necesidades de ayuda humanitaria de los sectores más desfavorecidos.
La ONU, Washington, la Unión Europea y numerosas embajadas extranjeras han hecho constantes llamamientos al diálogo entre el Gobierno y la oposición.
El último intento, la Embajada de EEUU reiteró el lunes su petición a que se emprendan conversaciones entre “todos” los actores políticos, “sin condiciones previas”.
Pero la oposición rechaza esta coletilla, porque su única condición previa, de la que no abdica, es que deje el poder el presidente Moise, a quien culpan de la crisis.
Moise se aferra al poder y ha reforzado sus llamamientos a la oposición para mantener la “serenidad” y poner coto a las protestas violentas, a la vez que culpa de todos los males al “sistema de explotación” que impera en Haití desde la época colonial.
A pesar de los reiterados llamamientos al diálogo, las negociaciones o los acuerdos entre el Gobierno y la oposición “parecen casi imposibles”, dijo Ary Régis, profesor en la Universidad Estatal de Haití.