Diario Libre (Republica Dominicana)
Triunfalismo electoral
La ubicación geográfica tampoco parece ser determinante, debido a que incide en zonas urbanas y rurales
Es una dolencia susceptible de afectar a personas de cualquier edad, sexo y condición social. No están inmunes quienes provienen de familias pobres, de clase media, o acaudaladas. El nivel educativo no es un factor excluyente, pues pueden contraerla tanto los más destacados intelectuales como los que apenas saben escribir su nombre. La ubicación geográfica tampoco luce ser determinante, ya que incide en zonas urbanas y rurales. Y no parece que el tipo de posición en juego limite su alcance, observándose en candidatos a cargos de máxima jerarquía, así como en los que aspiran a los puestos más humildes.
El triunfalismo electoral se da cuando un candidato o su equipo se sienten tan seguros de la victoria, que su comportamiento refleja ese convencimiento. Puede ocurrir aún si las encuestas no les favorecen. Y es una condición transmisible, pues es frecuente que comience por el entorno y se vaya propagando, promoviendo actuaciones basadas en un sentido de autosuficiencia.
Sus consecuencias más notorias, ya que el éxito aparenta ser inevitable, es debilitar la búsqueda de apoyos adicionales, descuidar respaldos que podrían ser valiosos, y confiar demasiado en la estrategia que se ha venido siguiendo.
De hecho, el triunfalismo no se manifiesta sólo en la política. En la economía se da en forma de inversiones en proyectos temerarios y en la aplicación de medidas sin sopesar plenamente sus efectos. En ese sentido, exhibe características propias de las euforias colectivas.
Como algunas otras dolencias, la probabilidad de contraerla está relacionada con ciertos rasgos de los afectados. Éstos suelen ser receptivos a las opiniones optimistas, lo que en sí mismo no es malo, pero tienen además una gran confianza en su habilidad para sortear obstáculos y persuadir a otros. Son proclives, por lo tanto, a descartar indicios preocupantes y a consolidarse en grupos que piensan de la misma forma, reforzándose recíprocamente en sus convicciones acerca de lo que sucederá. ●