Escasez de trabajadores

Casi toda la población dominicana podría encontrar trabajo en los EE.UU. si viviera allá y llenara los requisitos. Después de llegar a cerca del 15% al comienzo de la pandemia, la tasa de desempleo en la economía estadounidense ha descendido drásticamente. Alrededor de diez millones de empleos estaban disponibles a principios de septiembre, sin encontrar candidatos interesados en ocuparlos. Trabajos usualmente reservados para mayores de 18 años, han tenido que ser ofrecidos temporalmente a personas de 14 o 15. Bonos y regalos prometidos a los que acepten trabajar no han sido suficientes para incentivarlos.

La economía del comportamiento puede explicar esa situación. Si se reciben cheques del gobierno por correo como subsidio extraordinario, más beneficios por desempleo ampliados en monto y extendidos en duración, la motivación por retornar a laborar, sujeto a horarios y tiempo de transporte, disminuye significativamente. Y a pesar de la escasez de trabajadores, el gobierno y las autoridades monetarias estadounidenses continúan emitiendo dinero e incrementando los gastos públicos, creando más demanda por empleados de diversos tipos.

En adición a esa combinación de mayor demanda y falta de motivación, algunos analistas consideran que la experiencia de trabajo provocada por la pandemia puede haber modificado la estructura laboral en los EE.UU. y posiblemente en otros países también, creando ocupaciones por cuenta propia e incrementando las subcontrataciones, lo que reduce la atracción de los empleos tradicionales.

Y, en adición a todo lo anterior, numerosas personas próximas a la edad de retiro, con la anuencia de sus empresas apoyadas en exenciones y ayudas tributarias, optaron por acogerse a pensiones anticipadas, abriendo puestos que se sumaron a la demanda insatisfecha por trabajadores.

Se observa también que muchas de las vacantes corresponden a servicios de baja calificación y remuneración, que despiertan poco entusiasmo.