Diario Libre (Republica Dominicana)
Dos niñas y su tío mueren atropellados por un vehículo que conducía un menor
El joven de quince años está preso para ser sometido a la justicia
SAN LUIS. Un menor, supuestamente ebrio, que conducía a alta velocidad y perdió el control del vehículo, atropelló y mató a dos niñas de tres y ocho años de edad y a un tío de estas en el frente de la casa de las víctimas en el barrio El Establo, en el Distrito Municipal de San Luis.
La tragedia ocurrió el pasado sábado, cerca de las 9:00 de la noche, en la casa número 8 de la calle Principal del referido sector. El vehículo se salió de la vía y penetró en la parte exterior frontal de la vivienda, donde se encontraban las niñas junto a su tío, tras impactarlos, chocó con un árbol de jobo y una pared.
En el lugar, todavía ayer había sangre de las niñas y del tío. Justo donde cayeron los cuerpecitos, había juguetes viejos abandonados allí, una muñequita sin ropa, una bicicleta rosada.
Dos ataúdes
Dentro de la pequeña casita de madera estaban los dos ataúdes blancos de Yenderis de la Cruz Pérez, de tres años y Anyeris de la Cruz Pérez, de ocho, uno al lado del otro, como siempre se mantuvieron en
Engel M. de la Cruz vida. Cerca, el gemido desconsolado de la madre, apenas se entendía la frase: “Era lo único que tenía”.
Mujeres, hombres, niños y niñas lloraban las muertes de las dos pequeñas que, al momento del accidente, acababan de llegar a su casa, junto a su madre, de comprar los alimentos para cenar. La mamá entró a la vivienda para buscar dónde servirles lo comprado, ellas se quedaron afuera, en un pequeño espacio exterior, con su tío, Rodolfo Cáceres, de 66 años, entonces, se escuchó el impacto. Las niñas murieron en el acto.
Cáceres fue la otra víctima de la tragedia. Falleció en el hospital y su cadáver será sepultado hoy.
Era tanta la gente que acudió al velatorio que hubo que cerrar la calle. En el lugar, además de sangre, había fragmentos de cristales, y piezas del vehículo que se desprendieron al impactar una pared divisoria y el árbol que lo detuvieron. De la tragedia se acusa a un jovencito de unos 15 años, que tenía por costumbre conducir a alta velocidad por la calle, cuenta el padre de las menores, Engel Manuel de la Cruz, mientras se apoya en dos mujeres para no caerse.
Huyó del lugar
Cuenta que el menor huyó de la escena del accidente, pero su padre luego lo entregó a las autoridades. Dijo que eran sus dos únicas hembras. Le queda solo un varón mayor de edad.
“Ellas eran la luz de mis ojos, por quienes yo siempre he trabajado, yo trabajaba enfermo, nunca me detuve por mis hijas”, Su voz se quebró y no pudo seguir hablando, mientras sus ojos se llenaban de lágrimas.
Pablo Miguel Castillo, tío materno de las niñas, dijo que un grupo de “muchachitos” transitan en carros y motocicletas a alta velocidad por la calle porque los padres no les ponen control.
“De ahí a ahí te ponen un vehículo a doscientos, bajando y subiendo. Las autoridades tienen que poner control”, dijo.
“Eran la luz de mis ojos, por quienes yo siempre he trabajado, yo trabajaba enfermo para mis hijas”
Padre de las niñas