Gobierno aprovecha los vacíos de poder
La pérdida de esperanzas está vinculada también a la incapacidad de la oposición para presentar una alternativa de gobierno. Está perennemente dividida y absorta en sus propias batallas internas de ego. El gobierno ha aprovechado los vacíos de poder legales para poner trabas a la oposición sin generar demasiadas protestas en la comunidad internacional. Durante gran parte de la primavera y el verano, la oposición pareció regresar al buen camino, recopilando unos dos millones de firmas — 10 veces el mínimo requerido — para forzar un referéndum revocatorio contra Maduro. Las encuestas sugieren que el 80% del país quiere su salida. Pero después de que una multitudinaria manifestación con un millón de personas saltase a los titulares en todo el mundo en septiembre, el ejecutivo suspendió la iniciativa. El gobierno de Barack Obama, entonces presidente de Estados Unidos, envió a un alto diplomático para negociar con los líderes de la oposición y tentarlos con un diálogo patrocinado por el Vaticano, que ha fracasado. Para muchos fue como una capitulación, con el único resultado de que Maduro nunca fue castigado por atropellar la Constitución. Ahora, hay una iniciativa en marcha para impedir que los partidos de la oposición puedan presentarse en coalición a los próximos comicios.