Los jóvenes al mando
Se habla aquí y en otras partes del círculo vicioso que se da en el plano laboral, en detrimento de la juventud: no se contrata a los jóvenes por falta de experiencia, y estos no tienen experiencia porque no los contratan. La de nunca acabar. El asunto se ha dado localmente, en cierta medida, en el plano político. A los muchachos, se dice y se repite, los partidos y sus dirigentes los buscan para hacer campaña, pero no para asumir roles de importancia. Eso ha ido cambiando últimamente, ya sea porque los jóvenes estén empujando más y mejor, o porque quienes tienen el poder político han entendido el fenómeno y estén cambiando de manera positiva. A Luis Abinader, el responsable hoy de emitir los decretos, habrá que reconocerle que ha llevado a la práctica el reiterado discurso que llama a dar mayor participación a los jóvenes.