Hondureños retoman peregrinaje migratorio por Guatemala hacia los Estados Unidos
GUATEMALA. Cientos de hondureños volvieron a la carretera para continuar su marcha en una nueva caravana que busca llegar a Estados Unidos de forma irregular, escapando de la pobreza y la violencia en su país.
Abrigados por la temporada de frío en la capital guatemalteca, los hondureños atravesaron calles y avenidas caminando y otros pidiendo aventón a los automovilistas para dirigirse hacia el suroeste del país, al poblado de Tecún Umán, fronterizo con México, a unos 300 km desde el centro de la capital, donde pernoctaron, acotó AFP.
Horas después, unos caminaban por el asfalto caliente mientras otros eran transportados en la parte trasera de pickups y algunos se arriesgaban al trasladarse subidos en las plataformas de camiones cargados con cemento o hierro.
“¡Fuera JOH!”, “¡Fuera JOH!”, gritaban los migrantes en referencia a las iniciales del presidente hondureño Juan Orlando Hernández, a quien culpan de la crisis económica que vive el país.
“Ya estamos más cerca de la frontera con México, vamos para adelante”, dijo un hondureño desde la parte alta de trailer que subió a unos 30 migrantes cuando pasó a cargar combustible a una gasolinería en el km 126 de la carretera al Pacífico.
Muchos dirigieron sus críticas a la clase política de Honduras, a la que responsabilizan de crear las condiciones que los impulsan a emigrar.
“Está dura la crisis en Honduras. Todos los políticos en Honduras son ladrones, todos, diputados, alcaldes, presidentes”, dijo a la AFP Genaro Hernández, un agricultor de 52 años.
Aunque inicialmente el grupo fue estimado en cerca de 1.000 personas, las autoridades guatemalte- cas indicaron que participan unas 2.000, que partieron el martes pasado de la ciudad de San Pedro Sula, en el norte hondureño, emulando dos éxodos que salieron de ese país en octubre pasado.
Otra caravana de unos 200 salvadoreños salió el miércoles desde la capital del país centroamericano.
Estas corrientes migratorias han despertado la furia del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien nuevamente urgió la construcción de un muro en la frontera de su país con México.
Los hondureños, entre ellos familias completas con niños, fueron atendidos en albergues de la Casa del Migrante de la Iglesia católica y la estatal Universidad de San Carlos, en el centro de la capital.
Las horas de caminata bajo el sol y la lluvia hicieron mella en varios de los migrantes, que recibieron atención médica por presentar dolores de cabeza, complicaciones respiratorias y dolores estomacales, entre otras afecciones, dijo Roxana Palma, psicóloga de la Casa del Migrante.