Los accesorios de pelo para niñas nunca pueden faltar en su atuendo
VERÓN. Los moños para niñas son accesorios del cabello que se han utilizado durante muchos años. En principio solía usarse sólo recoger el cabello, pero posteriormente se fueron elaborando diseños que no sólo sirvieran para esos fines, sino que además complementaran el “look” de cualquier pequeña
Los tipos de estos adornos van desde flores de tela, lazos en tela, coronas en fieltro-lycra, coronas de flores, corbatines, tocados, entre otros accesorios del cabello.
Además del brillo, listón plástico y personajes de Disney, también forman parte de la moda en moños para las pequeñ as. Elba Díaz, creadora de ganchos para el pelo de niñas, explicó que hacerlos es algo sencillo, porque se puede hacer en un día.
“Aunque cuando un cliente se me acerca con una pieza en específico, y no tengo disponible los materiales, suelo tardar más de tres días, ya que a veces en la zona no tenemos mucha variedad de materiales”, indicó Díaz.
Los precios dependerán del mo- delo, oscilan a partir de 350 hasta 1,000 pesos la unidad. Por ahora, se ha concentrado más en encargos personalizados, ya sea para alguna actividad personal o del colegio, así como para bautizos y cumpleaños. O también para alguien que necesite hacer un regalo.
Gladys Peña de Reyes, quien se dedica a la elaboración de adornos para el pelo de las niñas, dijo que realiza los lazos con adornos de masa flexible, los cuales tienen muy buena salida.
Hace alrededor de 100 ganchos para el comercio de diferentes colores, formas y tamaños. El precio varía dependiendo del trabajo que se lleve la elaboración y la cantidad de material que lleve.
Manifestó que normalmente hace los adornos de los muñequitos que más les gustan a los niños. Sin embargo, expresó que un diseño muy clásico que no debe faltar en el repertorio de ninguna pequeña, es el moño pequeño de color rosa, rosa viejo o una gama derivada de este tono, con contraste en tonalidades claras y una hermosa piedra al centro que acentúa mayor el diseño.
“Aunque cuando un cliente se me acerca con una pieza en específico, y no tengo disponible los materiales, suelo tardar más de tres días, ya que a veces en la zona no tenemos mucha variedad de materiales”, Elba Díaz.