EJEMPLO DE RESPONSABILIDAD SOCIAL
Hace cien años los hermanos Ramón y Manuel Corripio llegaron al país y se establecieron con una meta clara: trabajar duro, dar servicio, ganar lo justo, reinvertir, fomentar puestos de trabajo y estar prestos a socorrer a los necesitados.
En un centenario, eso ha hecho la familia Corripio, que llegó de España y se estableció en República Dominicana para siempre. Manuel Corripio y su hijo José Luis –Pepín- trabajaron arduamente en sus negocios agotando jornadas de hasta 16 horas al día, descansando solo la tarde del domingo, cada semana. Ese esfuerzo y una cultura de vida austera, dio a esta familia no solo éxito económico, satisfacción y gozo espiritual, sino el reconocimiento de la sociedad dominicana como empresarios decentes, comprensivos y siempre prestos a apoyar a quienes requieren auxilio. Ahora que se cumplen cien años del establecimiento en el país de la familia Corripio, Pepín como tronco principal junto a su esposa, Ana María Alonso; sus hijos Manuel, Lucía, José y Ana Corripio, han decidido dar un abrazo a toda la sociedad dominicana por la acogida.
Ese abrazo, según anunciaran el lunes en una conferencia de prensa, consiste en agradecer, durante un acto a celebrarse el 13 de noviembre de 2017 en el Teatro Nacional, a las 7:00 de la noche, a cien instituciones de servicio –sin fines de lucro- por sus esfuerzos a favor del país. Aunque el mismo Pepín Corripio ha dicho que no es lo más significativo del abrazo, cada una de ellas recibirá un millón de pesos para que sigan trabajando con fe, entusiasmo y confianza en la justeza de su obra.
En cien años la familia Corripio ha dejado claro que quienes confían en el país no se equivocan y el éxito de sus emprendimientos se puede asegurar con ideas claras y disposición de trabajo duro y honrado.
Con cien años de trabajo y aportes al país, la familia Corripio da el ejemplo de plena comprensión de su responsabilidad social empresarial y familiar al distinguir y ayudar a cien instituciones solventes que socorren cada día a quienes más necesitan. ¡Larga vida a la familia Corripio por su ejemplo de trabajo, de inversión y confianza en el país!