Lo dulce de la Cuaresma
Las habichuelas con dulce, ícono de la temporada, han pasado de plato a postre. Otros muy consumidos son el chacá, las habas con dulce, el arroz con leche, los buñuelos y la jalea de batata.
El moro ritual de esta temporada es el de habichuelas rojas o frijoles; el ritual en la religiosidad popular es el de habichuelitas negras y el de Navidad es el de guandules. Eso no quiere decir que “meterán” preso al que viole esta regla, ya que quien hace la costumbre o la tradición es el pueblo.
Como se ablandó una buena cantidad de habichuelas para hacer el moro, dejaron también una buena parte para elaborar el postre ícono de esta temporada: las habichuelas o frijoles con dulce, que han pasado de plato a postre. Antes, como no todas las familias tenían refrigerador o ne- vera, se elaboraban para consumirlas ese mismo día como cena, sirviéndole a cada integrante de la familia un jarro, que cada uno lo administraba, además de pasarle al vecindario, intercambiándose, ya que cada familia le da un toque diferente. Unas le agregan coco, otras leche evaporada o de vaca o las tres juntas; la batata le da el espesor al igual que la misma harina de los granos. De las especias, entre las más usadas están la canela y el clavo dulce; también las uvas pasas y algunas personas mayores le agregan un punto de jengibre para evitar que la batata (camote o boniato) les dé “jervedero” o “jervores”, que es la acidez estomacal. Las galleticas de leche “crucificadas” o el casabe se le agregan al servirlas. Algunas personas por desconocimiento le agregan harina de trigo o maicena para espesarlas, otras le agregan chocolate para “darle fuerza”. Otros postres que están presentes en esta época es el chacá, maíz caquia’o o maíz pela’o, que se consume principalmente en el Sur, además de las habas con dulce. En el Cibao se prepara también el arroz con leche, que pasó de plato a postre, ya que se hacía para la cena, y también el arroz con dulce, que lleva leche de coco, un plato tradicional de Navidad en Puerto Rico presente en nuestro país.
Dos postres que se elaboran, además, son la jalea de batata, una herencia canaria, que se consume en Baní y los buñuelos, bolas o bollos elaborados con ñame, yuca, papa (en San José de Ocoa) o batata majada, al que se le agregan huevos y mantequilla, luego se fríen y se colocan en un almíbar de canela, clavo y uvas pasas.