UN MENSAJE SOBRENATURAL PARA EL PAÍS ENCUENTRO PARA EMPODERARSE EN LA FE
La buena noticia llegará a través del Movimiento Apostólico, con un congreso que se efectuará este fin de semana en la iglesia Monte de Dios.
Conscientes de que las personas necesitan empoderarse y encaminar su vida de acuerdo a los principios que dicta el señor, Miguel y Montserrat Bogaert, pastores de la Iglesia Monte de Dios efectúan todos los año el congreso ‘Movimiento Apostólico Sobrenatural’ (Mas) que se realizará los días cinco y seis de este mes. En esta fecha celebran además el aniversario de la congregación.
Tienen claro que la palabra dice que sin fe es imposible agradar a Dios y, en base a ello es que concentran el mensaje que transmiten a través del congreso. “Queremos mediante este encuentro adentrar a los participantes a un nivel de fe que les permita tener la herramienta guiada por Dios para lograr actuar en base a ella”, coinciden en resaltar los pastores.
La independencia del hombre hacia Dios es lo que ha traído el caos a la Tierra. La fe se quebranta cuando el ser humano asume una postura de autosuficiencia considerando que no necesita a Dios en su vida, y es justo allí donde surge aquello denominado como tribulaciones, que son definidas para los pastores como la escuela para aprender y convertir a cada persona en un individuo conforme a la voluntad del Ser Supremo.
El objetivo general de este congreso es lograr que las personas puedan observar lo sobrenatural para empezar a depender de Dios, que es un ser fundamental para que puedan cambiar su vida y trascender a un plano profundamente espiritual, sostiene Miguel Bogaert.
Añade que, para superar aquellas situaciones que se creen difíciles es vital estar muy pendiente y aprender a identificar la voz de Dios que puede manifestarse de múltiples formas, como por ejemplo, por sueños, pálpitos, revelaciones, entre otras vías. A esta consideración se suma Montserrat Bogaert.
La enseñanza principal que quieren lograr a través del congreso es que las personas puedan observar la manifestación del poder de Dios, asimilando con total convicción que es hacedor de todas las cosas. Esto le permite a la persona abrir su mente para erradicar esas estructuras mentales que imposibilitan llevar una vida plenamente en la fe. “La mentalidad que tenemos y la forma de pensar nuestra hace que no- sotros no podamos ver la grandeza de Dios”, puntualiza el pastor Bogaert.
Es por ello que el principio fundamental de la fe es cambiar el modo de pensar, consideran. “No puedes buscar de Dios si tienes rechazo, miedo, odio o rencor”, comenta el pastor, quien a seguidas informa que todos estos sentimientos tortuosos serán tratados en el congreso Mas para lograr una trasformación verdadera.
Cuando cambias tu mentalidad se produce en tu vida una evolución notoria, que te lleva a un crecimiento espiritual que da como resultado encontrar tu propósito. Con esto logras identificar tus errores y sobre todo, reconocerlos. “Es ahí cuando realmente se produce el cambio que comienza por uno mismo”, sostiene Montserrat.
Es a partir de esta consideración que, durante el encuentro también se tratará el tema de la familia, núcleo más importante de la sociedad, en la que el matrimonio es el génesis.
“Un matrimonio que no tiene a Dios como su centro se traduce en hijos carentes del mismo enfoque”, coincide la pareja.
Rol de la iglesia
La fuerza de la iglesia Monte de Dios son los matrimonios. Al trabajar la conducta de la pareja esa familia completa cambia, es por esto que trabajan constantemente para insertarla dentro de una sociedad de iglesia, rigiéndose por los principios básicos para lograr un núcleo armonioso.
“Todo hombre es pecador, es imposible vivir una vida exenta del pecado. El problema radica cuando no sé es capaz de reconocerlo y cuando no existe un sentimiento de arrepentimiento”, enfatiza el pastor.
A esta opinión, Montserrat añade: “Dios puede levantarte de tus errores, pero jamás de las excusas”. Al justificar el pecado, ambos sostienen que con este se impide que la obra de Dios se manifieste en la vida y se viva del engaño.