Ana Simó ‘ama ser mujer’
Dice que algunas mujeres tienen historias de depresión prolongada sin trabajar, lo cual entiende no debe ser así porque hay que sanar las heridas para poder seguir.
Preocupada por los problemas que afectan a la sociedad dominicana en lo que tiene que ver con depresión, adicciones a las drogas, al Internet, al juego, a la infidelidad, así como el intento de suicidio, baja autoestima, ansiedad, divorcio, abuso sexual y violencia, la psicóloga y terapista sexual y de familia, Ana Simó, busca la forma de contribuir a que estos problemas disminuyan o desaparezcan.
Sostiene que es alarmante el número de casos de trastorno de la personalidad que hay en el país, seguido por de los de violencia, los cuáles envuelven a un gran número de mujeres. “Es por esto que quiero llegar a la gente que no puede ir a consulta”, afirma al anunciar la conferencia titulada: ‘Amo ser mujer. Sanando Heridas’, la cual será en el auditorio del Salón de la Fama, del Centro Olímpico, el jueves 10 de este mes, a las 7:00 de la noche.
Explicó que algunas mujeres tienen historias de depresión prolongada no trabajadas. “Creen que van a desaparecer y no es así. Muchos creen que una persona depresiva vive acostada y no deja ver lo que es incierto. No nos detenemos a observar que hay gente depresiva muy productiva, que trabaja mucho y que tal vez le tienen otro nombre a esa depresión”.
Una forma de darse cuenta es si tiene fatiga crónica, sufre de mal humor, tiene poca tolerancia, no tiene deseo sexual, sufre trastorno del sueño (duerme mucho, o duerme poco), llega el domingo y pese al cansancio no frena; hay sentimiento de culpa, no tiene tiempo para sí misma y si lo saca hay una presión social, la gente le cuestiona, subraya Simó.
Por esa razón, sostiene hay mujeres que si tenían como válvula de escape salir con sus amigas a compartir y tomar una cerveza, dejan de hacerlo, por esa presión social. “Tengo una paciente que me decía yo estoy muerta por dentro”, lamenta la psicóloga.
De este caso dice que pese a ello, esa paciente es una persona exitosa en su trabajo, pero confrontaba problemas en su matrimonio debido a que su pareja es un gastador compulsivo y ella tiene que ayudar a pagar su deudas. La gente lo ve como un buen padre ella sufre esa presión.
Sobre el uso de drogas, comenta que es preocupante que entre los jóvenes se consuma marihuana como algo natural y que se normalice el uso de alco- hol. “Aquí creemos que el que es alcohólico es el borrachón que anda cayéndose y no es así. Es una persona que necesita beberse el trago para sentirse bien. Hay personas que dicen: ‘yo sólo bebo los sábados y los domingos, no soy alcohólico, pero no es así, lo es como si tomara todos los días”, sostiene.
Sobre el abuso sexual, la especialista dice que la pedofilia no es enfermedad, sino que son hombres que buscan dominar a sus víctimas. Subraya que aunque se da en todas las clases sociales es mayor en la clase baja por el hacinamiento en que se vive.
Aprender a amarse
La psicóloga señala que el hecho de que la mujer busque el bienestar de todos a su alrededor, dejándose a sí misma en segundo plano, demuestra que se sigue postergando. “Y precisamente evitar que eso suceda es lo que buscamos con esta conferencia que tiene como objetivo proveerlas de las orientaciones para que logren su propio bienestar y aprendan a amarse primero que todo, para que puedan también dar ese amor”.