INCIDENTE EN FRONTERA GENERA UNA INDIGNACIÓN COLECTIVA
Decenas de haitianos con machetes, cuchillos y palos secuestraron el sábado durante varias horas al cardiólogo Pedro Ureña y a siete de sus amigos ante la apasible mirada e inoperancia de dos militares del Ejército Dominicano que no hicieron nada por ayudarlos.
Con actitud desafiante y amedrentadora, la turba de haitianos despojó al grupo de dominicanos de sus motocicletas y autobuses cuando transitaban por la carretera Internacional, en la localidad La Palmita, a unos 25 kilómetros de Restauración,
Tanto Ureña como varios de sus amigos andaban con vestimenta deportiva y cascos de motocicletas, y fueron socorridos por un grupo de residentes dominicanos de esa zona que con celulares en mano empezaron a grabar la situación.
“Mira cómo le están quitando el motor, ¡por Dios!”, exclamaba uno de los ciudadanos mientras grababa el momento en que los haitianos se subían en la motocicleta con machetes y palos en la mano.
Los retenidos y moradores se quejaban por la inexistente vigilancia de ese lugar por parte de los militares fronterizos.
“¿Dónde está la protección de nosotros? Eso es mentira. Ahora mismo hay un solo guardia, pero pueden traer 10 guardias y no estamos reforzados en nada”, contaba un señor al cardiólogo Ureña tras ser despojado de su motocicleta, según se observa en el audiovisual.
Otra de las personas que estaban grabando describe el drama del secuestro que vivió el especialista médico. “Ahí vean señores como ellos, los haitianos, cargan con su motor”. Mientras otro recriminaba a uno de los militares dominicanos por no hacer nada al respecto, al tiempo en que lo enfocaba con su cámara del celular.
“Si ustedes no están haciendo nada aquí, váyanse, o díganlo por allá lo que está pasando”, agregó.