La estabilidad financiera sí es posible
Vivimos en tiempo del “big data” por lo cual hoy en día tanto las empresas como los individuos deben ser capaces de poder convertir data en información que pueda ser monetizada, es decir convertida en dinero y sea útil para tomar decisiones que les ayuden a ser cada vez más costoeficientes ya que es una de las maneras más idóneas para mantener la salud financiera de las organizaciones. Y desde luego, si extrapolamos este principio, sería también igual de útil para ayudar a los individuos a alcanzar la tan deseada “libertad financiera”. Aunque este puede ser un término muy subjetivo, imagínate tener la educación de tus hijos garantizada, poder comprar el vehículo de tus sueños, sin preocuparte por el mantenimiento, poder decidir cuando quieras irte de viaje a Europa, Estados Unidos o cualquier parte del mundo que desees, hospedándote en buenos hoteles, visitar los lugares que más te gusten, mientras tu empresa o trabajo siguen su ritmo de producción de modo que garantizan tranquilidad y seguridad en los ingresos, mientras te das esa buena vida, como le llamaríamos a esto? Sin dudas me parece que muchos coincidirían con “libertad económica”. ¿Y qué tal si te digo que todo esto es posible? ¿Sabías que libertad financiera no significa necesariamente ser rico?
Al momento de hablar de libertad financiera no nos referimos a que las personas necesariamente tengan que ser ricas, más bien que presenten buenos signos vitales en términos económicos, es decir, buenos indicadores en los niveles que les ha tocado administrar, en realidad cada individuo es como una pequeña empresa en sí mismo. En tal sentido, para una persona alcanzar y mantener su estabilidad financiera, es recomendable tomar acciones que le permitan exhibir los siguientes signos:
1-Hacer uso inteligente del dinero. 2-Mantener un índice de endeudamiento bajo. (-30%).
3-Mantener un equilibrio entre liquidez e inversiones.
4-Buena estructura de capital (capital propio/ deudas).
5-No tomar riesgos innecesarios. Consejos que ayudan a la estabilidad financiera a) Enfocarnos en las variables controlables, los gastos son más fáciles de controlar que los ingresos, pues enfócate en ellos. Tú puedes elegir en qué gastas tu dinero pero no puedes elegir con igual autonomía cuándo te deben hacer un aumento salarial. b) Toma préstamos que aporten bienestar o creación de patrimonio c) Encuentra siempre oportunidades para reducir gastos. Recuerda que no solo se ahorra guardando, sino gastando menos y de manera más inteligente.