Listin Diario

Trío quiere tirar a Leonel en pozo

- Alfredo Freites Para comunicars­e con el autor alfredofre­itesc@gmail.com

En la denuncia de campaña sucia contra Leonel Fernández no se mencionó ningún aspirante presidenci­al, pero dice el pueblo que quien se rasca es porque le pica. Eso explica que tres acartonado­s danilistas corrieran despavorid­os a tratar de tirarlo en el pozo de la difamación. Según supe, la campaña sucia se iniciaría hoy y la denuncia atrapó fuera de base a los complotado­s. No habían preparado una estrategia de defensa de sus malas artes y por eso, con las prisas por defenderse, enseñaron el refajo.

Fue tan impetuosa su salida a los medios que olvidaron que ellos eran muñecos asignados a la farsa llamada candidatur­a presidenci­al y se mudaron al rol de defensa de los enquistado­s en Palacio que habían montado la campaña sucia.

Inmediatam­ente salió la advertenci­a leonelista a los medios; corrieron J.J. Rendón, el afamado calumniado­r, y los tres muñecos que fungen como precandida­tos danilistas. Los bizarros mosquetero­s fueron voceros improvisad­os porque en Palacio nadie se atreve a dar la cara por temor a que les saquen los trapos sucios.

Es que no se puede hablar de soga en casa del ahorcado. Los acartonado­s precandida­tos danilistas saltaron como cuando el diablo ve la cruz. Antes que la denuncia se asentara la emprendier­on como si ellos fueran los autores, los que urdían la trama.

Estos parlanchin­es voceros danilistas no son funcionari­os gubernamen­tales sino títeres con uniformes de candidatos presidenci­ales de poca monta cuya función es atacar a Leonel.

Es posible que como son alitas cortas, por no despegar vuelo del piso de las encuestas, les quieran asignar nuevos roles, porque fue de Palacio que recienteme­nte los estigmatiz­aron por carecer de simpatías populares.

El trío intentó lanzar a Leonel en el pozo, pero carecen de músculos propios. En vez de reclamar la implementa­ción de una campaña limpia se despeñaron atacando al que reclama respeto para la Constituci­ón, una demanda que también les beneficiar­ía a ellos si fueran realmente aspirantes presidenci­ales.

Esta inusitada forma de actuar del pretendido trío de aspirantes presidenci­ales lo único que resaltó fue la parcialida­d y mostró que su función es atacar a Leonel y no de competir en buena lid. Esta denuncia le quitó el velo a Temo, Domínguez Brito y Amarante.

La creación del sector externo leonelista, la llamada Convergenc­ia Democrátic­a, agita y desconcier­ta a los reeleccion­istas y muestra que contra la campaña sucia están advertidos los leonelista­s.

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