Santiago vivió su primer día de cierre de los negocios
morir de hambre”.
Algunos autobuses de la parada del 9 de la Duarte han salido hasta con dos pasajeros aseguró José Manuel Almánzar, chofer de la ruta, quien pidió al gobierno una ayuda a ese sector para cubrir las pérdidas que les está causando la situación actual.
Los autobuses, que regularmente salen a su destino cada 30 minutos, están tardando una hora y treinta minutos para salir con apenas dos pasajeros.
“En una hora más, va cayendo el transporte, porque si la gente no sale, las guaguas tampoco, yo tengo muchos amigos que no salieron, muchas guaguas están saliendo porque amanecieron aquí en la capital, pero de los pueblos casi no están viniendo”, dijo un chofer de la parada desde donde salen los autobuses de San Juan de la Maguana, Elías Piña, Hondo Valle, Vallejuelo, El Cercado, Bohechío, Fantino, Pedro Santana, Bánica, El Llano y Sabaneta.
Sobre las medidas a implementar en el transporte público, la directora del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), Claudia Franchesca de los Santos, dijo que se limitará la cantidad de pasajeros en los carros públicos a cuatro personas y en autobuses al número de asientos del vehículo. Además, se deberá de mantener la higiene de las instalaciones, superficies y vehículos, limpiándolos con frecuencia.
Al entrar en vigencia las medidas restrictivas de las actividades por la declaratoria oficial de emergencia nacional para controlar el coronavirus, la ciudad de Santiago se encuentra semiparalizada, con la reducción significativa de las labores comerciales, industriales, de transporte y otras.
Las calles y avenidas tradicionalmente congestionadas a todas horas, estaban ayer con escasa circulación vehicular incluyendo los carros del transporte de pasajeros en las diferentes rutas.
Muchos establecimientos comerciales han cerrado sus puertas y otros laboran parcialmente con una reducción significativa de sus empleados, ya que han enviado a sus hogares a los de mayor edad y los que tienen algunas complicaciones de salud.
En los comercios abiertos, como supermercados, colmados, ópticas, centros de salud y farmacias, la mayoría de los empleados llevan puestas mascarillas como forma de protección.
También los transeúntes y quienes abordan vehículos llevan puestos esos atuendos de previsión, mientras que los centros de diversión, cafeterías y especialmente el comercio informal, está paralizado.
En las paradas de autobuses y minibuses que viajan a Santo Domingo y otras localidades, se observa una reducción importante en la cantidad de vehículos, muy pocos pasajeros abordándolos.
En los supermercados la afluencia de clientes es significativa, aunque en menor medida que días anteriores, cuando la población acudió en masa a comprar.
Al cuestionar a ejecutivos de algunos supermercados, expresaron que sus suplidores les siguen abasteciendo de artículos, tanto industriales como agropecuarios, por lo que la población no debe tener preocupación con la adquisición de los alimentos.
La gobernadora de la provincia, Ana María Domínguez, hizo un llamado a los empresarios para que adopten medidas especiales de protección de sus trabajadores y empleados, acorde con las líneas trazadas por las autoridades nacionales.
Dijo que el llamado va también para las zonas francas industriales que producen para el mercado exterior, que deben asumir el compromiso de resguardar la salud de sus empleados, sin que ello implique la parálisis de sus labores. La funcionaria asimismo, llamo a la ciudadanía a observar la mayor prudencia y acatar las recomendaciones de proteger su salud, para reducir al mino la posibilidad de contagio del coronavirus.