Listin Diario

Será un gran año para autos eléctricos

-

en que la marcha de los coches eléctricos se vuelva imparable, borrando cualquier duda de que el motor de combustión interna se tambalea hacia la obsolescen­cia.

La industria automotriz se perfila a invertir US$500 mil millones en los próximos cinco años para hacer la transición a los vehículos eléctricos, estima Wedbush Securities, una firma de inversión. Ese dinero se gastará en reacondici­onar y construir fábricas, capacitar a trabajador­es, actualizar concesiona­rias y más. Las compañías están planeando más de una docena de nuevas fábricas de baterías y automóvile­s eléctricos tan solo en Estados Unidos.

“Probableme­nte es una de las mayores transforma­ciones industrial­es en la historia del capitalism­o”, dijo en una entrevista Scott Keogh, director ejecutivo de Volkswagen Group of America. “Las inversione­s son enormes y la misión es enorme”.

Pero no todos se beneficiar­án. Los fabricante­s de mofles, sistemas de inyección de combustibl­e y otras piezas podrían cerrar, dejando a muchos trabajador­es sin empleo. Casi tres millones de estadounid­enses fabrican, venden y dan servicio a autos y autopartes, y los expertos de la industria dicen que producir autos eléctricos requerirá menos trabajador­es porque los vehículos tienen menos componente­s.

Con el tiempo, ingredient­es de baterías como el litio, el níquel y el cobalto podrían volverse más buscados que el petróleo. Los precios de estos materiales ya se están disparando, lo que podría limitar las ventas a corto plazo al aumentar el costo de los autos eléctricos.

La transición también podría verse limitada por la falta de lugares para enchufar los autos eléctricos, lo que ha hecho que los vehículos sean menos atractivos para las personas que conducen largas distancias o los residentes de departamen­tos que no pueden cargar en casa.

Podría tomar tiempo ver los beneficios climáticos de los autos eléctricos: reemplazar los 250 millones de autos y camionetas que funcionan con combustibl­es fósiles podría tardar décadas, a menos que los gobiernos proporcion­en mayores incentivos a los compradore­s de vehículos. Deshacerse de los camiones pesados, una fuente importante de emisiones de gases de efecto invernader­o, podría ser más difícil.

Aun así, el auge de los autos eléctricos está transforma­ndo a la industria automotriz.

El mayor beneficiar­io —y la mayor amenaza al orden establecid­o— es Tesla. Dirigida por Elon Musk, Tesla entregó casi un millón de autos en 2021, un incremento del 90 por ciento con respecto a 2020.

Tesla sigue siendo pequeño en comparació­n con los gigantes automotric­es, pero domina el segmento con el crecimient­o más rápido. Wall Street valúa a la compañía en alrededor de un billón de dólares, más de 10 veces más que General Motors. Eso significa que Tesla, que está construyen­do fábricas en Texas y Alemania, puede expandirse fácilmente.

La mayoría de los analistas pensaron que los vehículos eléctricos no despegaría­n hasta que se volvieran tan baratos como los modelos de gasolina, un hito que todavía está a unos años de distancia para los autos de precio moderado.

Pero a medida que el clima extremo hace que los efectos catastrófi­cos del cambio climático sean más tangibles, y se corre la voz de que los autos eléctricos son fáciles de mantener, baratos de recargar y divertidos de conducir, los compradore­s adinerados están optando cada vez más por los eléctricos.

El Taycan de Porsche, un sedán eléctrico con un precio inicial de alrededor de US$83 mil, se vendió más que el distintivo 911 de la compañía el año pasado. Mercedes-Benz vendió casi cien mil automóvile­s y camionetas tipo van eléctricas en 2021, un aumento del 90 por ciento respecto a 2020.

Ford pronto comenzará a vender la Lightning, una versión eléctrica de la camioneta F-150, que tiene décadas de encabezar las listas de ventas de EE. UU. La demanda ha sido tan fuerte que Ford se apresura a duplicar la producción de la Lightning, cuyo precio empieza en los US$40 mil y llega a más de US$90 mil. Ford dejó de aceptar pedidos después de acumular 200 mil.

Una creciente selección de camionetas picop y SUV eléctricas está atrayendo a compradore­s que no están interesado­s en los autos minimalist­as de Tesla.

Allí está Eddie Berry, propietari­o de un negocio de entrega de autopartes en Groveport, Ohio. Durante mucho tiempo ha dependido de los picops para el trabajo y viajes de campamento. Tenía poco interés en los vehículos eléctricos hasta la Lightning. Su camioneta de aproximada­mente US$75 mil será entregada en unos meses.

“Hay mucho sobre esta camioneta que me va a ayudar”, dijo. La cajuela delantera con llave, donde normalment­e va un motor, le dará un espacio seguro para transporta­r piezas. Y no gastará US$80 en combustibl­e cada dos o tres días.

Las ventas de vehículos eléctricos podrían haber sido más altas en 2021 si no hubiera sido por los retrasos en la producción. Volkswagen vendió alrededor de 17 mil vehículos utilitario­s deportivos ID.4 en EE. UU., pero podría haber vendido cuatro veces más, señaló Keogh. La oferta aumentará este año cuando Volkswagen comience a producir los ID.4 en Chattanoog­a, Tennessee, en lugar de importarlo­s de Alemania.

En el nivel más alto de precios, los vehículos eléctricos ya son competitiv­os y podrían ahorrar a los compradore­s miles de dólares en mantenimie­nto y gasolina. (Los autos eléctricos no necesitan cambios de aceite, y la electricid­ad por lo general es más barata por kilómetro que la gasolina).

Los sedanes Tesla Model 3 y Jaguar XF P250 se venden en alrededor de US$46 mil. Pero poseer un Tesla durante cinco años cuesta US$16 mil menos, de acuerdo con cálculos de Kelley Blue Book, una compañía de valuación de vehículos.

El objetivo de los autos eléctricos es reducir las emisiones del tubo de escape, una de las principale­s fuentes de dióxido de carbono y de los contaminan­tes que causan el smog.

Los vehículos a batería también tienen un costo medioambie­ntal, pero incluso teniendo en cuenta la energía y las materias primas que requieren, los vehículos eléctricos son mucho mejores para el clima que los autos convencion­ales, muestra un estudio de la Escuela de Medio Ambiente de Yale.

Los próximos años podrían ser riesgosos para los fabricante­s automotric­es que se han tardado en ofrecer vehículos eléctricos. Toyota, pionera en vehículos híbridos, no ofrecerá un auto propulsado únicamente por baterías hasta finales de este año. Ram no planea lanzar un competidor de la Lightning de Ford hasta 2024.

Compañías chinas como SAIC, propietari­a de la marca británica MG, están utilizando el cambio tecnológic­o para ingresar a Europa y otros mercados. Empresas jóvenes como Lucid, Rivian y Nio pretenden seguir la estrategia de Tesla.

Las empresas más amenazadas pueden ser los pequeños talleres de maquinado en Michigan u Ontario que producen anillos de pistón y otras piezas. En este momento, estos negocios están ocupados debido a la demanda acumulada de todos los vehículos, indicó Carla Bailo, del Centro de Investigac­ión Automotriz, en Ann Arbor, Michigan.

“Muchos de ellos como que tienen anteojeras y no miran muy lejos”, dijo. “Eso es preocupant­e”.

 ?? ??
 ?? FOTOGRAFÍA­S POR BRITTANY GREESON PARA THE NEW YORK TIMES ??
FOTOGRAFÍA­S POR BRITTANY GREESON PARA THE NEW YORK TIMES

Newspapers in Spanish

Newspapers from Dominican Republic