Un gánster en el Kremlin
PARA PUTIN ERA NECESARIO SILENCIAR DE UNA VEZ A SU MÁS FORMIDABLE CRÍTICO Y LA ÚNICA FIGURA POLÍTICA DEL PAÍS QUE, INCLUSO DESDE EL PRESIDIO, LE HACÍA SOMBRA Y PODÍA EVENTUALMENTE ARRANCARLE EL
PODER. su propia vida, pues la policía política del Kremlin persigue con saña a los opositores dentro y fuera de Rusia. Hace tan solo unos días el ex asistente de Navalny, Leonid Volkov, era atacado a martillazos en el exterior de su domicilio en Vilnius, Lituania. Ya no se limitan a emplear agentes químicos para envenenar a los desafectos. Sin disimulo alguno, los sicarios de Putin recurren a métodos rudimentarios en un modus operandi propio de una organización mafiosa.
Antes de unas elecciones a todas luces fraudulentas para lucimiento y entronización de
Putin frente a tres aspirantes de guiñol, Yulia Navalnaya publicaba en el Washington Post un artículo de opinión titulado Putin isn´t a politician, he is a gangster (Putin no es un político, es un gánster) en el que advierte a Occidente que no baje la guardia ni se deje engañar con un personaje al que hay que “desenmascarar” en todo momento. No tiene sentido, argumenta, tratar como un jefe de Estado a quien sencillamente opera como el cabecilla de una organización criminal con ansias expansionistas y sin el menor interés en el bienestar del pueblo ruso.
En su afán por controlar la región (la invasión a Ucrania ya ha cumplido dos años), los recursos económicos los emplea en sostener al ejército y mantener una red de policía secreta con tentáculos internacionales. Desde su posición como dirigente supremo de una poderosa banda mafiosa, rendirle pleitesía (como en el pasado lo hizo Donald Trump mientras ocupaba la Casa Blanca) es besarle el anillo como si se tratara del mismísimo Michael Corleone, pero sin la banda sonora de El Padrino.
Unos días antes de las elecciones presidenciales, Putin le declaraba a un medio oficialista que Rusia está “preparada” para una guerra nuclear con armas “más modernas”. “Estamos listos”, aseveró, en un claro mensaje a Europa y Estados Unidos por la alianza a favor de Ucrania. Enrocado en el poder otros seis años, el objetivo del gobernante ruso es subyugar del todo a los ucranianos, y no pierde de vista a otros países bálticos que temen lo peor con su permanencia en el poder. Yulia Navalnaya le pide a la comunidad internacional que no ceje en el repudio a este régimen autócrata e imperialista y que se amplíen las sanciones contra el gobierno ruso. A las mafias hay que cercarlas hasta acabar con su estructura criminal. Putin es la cabeza de una serpiente cuyo veneno mata. [©FIRMAS PRESS]