Nadal vs Alcaraz: el primer raquetazo de Netflix
«Estamos entusiasmados por el éxito de nuestros contenidos adyacentes al deporte», dijo en julio el consejero delegado de la compañía, Ted Sarandos, tras presentar resultados cuatrimestrales. Se refería a la multitud de series documentales deportivas que Neflix ha creado en los últimos años y que han tenido muy buena recepción en el público. Desde ciclismo -’Tour de Francia: en el corazón del pelotón’-, al fútbol americano -’Quarterback’-, Fórmula 1 -’Drive to survive’- o incluso tenis, con ‘Break Point’. Según Sarandos, estos contenidos «presentan un deporte que ha estado entre nosotros durante mucho tiempo pero que quizá no es bien entendido por la nueva audiencia y se hace a través de una narración excepcional, no a través del deporte en vivo».
Netflix apunta al directo
Con el partido del domingo en Las Vegas, Netflix le pega un bocado a las retransmisiones en directo. Es la segunda vez que lo hace, después de un torneo de golf, también en Las Vegas, el pasado noviembre, entre profesionales del golf y pilotos de Fórmula 1, aprovechando que el circo del motor paraba en la ciudad.
Si Netflix le coge el gusto y decide entrar de lleno en ese mundo -en verano hubo informaciones de que pujó por los derechos de la Fórmula 1, pero se quedó muy lejos- se encontrará una batalla fenomenal por exprimir el contenido que más tira de las suscripciones en todo el mundo: las grandes ligas y los grandes torneos.
Sus competidores naturales han dado pasos enormes en ese negocio. El más activo es Amazon, que compra derechos de retransmisiones deportivas por todo el mundo. El acuerdo más sonado fue el que arrancó a la NFL para la retransmisión de los partidos de fútbol americano de los jueves, el llamado ‘Thursday Night Football’. El precio es abrumador -1.000 millones de dólares por temporada-, pero también lo es su impacto: Mike Cavanagh, el presidente de Comcast, un gigante estadounidense de servicios de internet, aseguró a finales del año pasado que ese partido suponía «el 25% del tráfico total de internet los jueves por la noche» y que había pasado el pico de uso tradicional de intervente del domingo por la noche al jueves por la noche.
En el mercado estadounidense, donde la transición hacia las plataformas de ‘streaming’ es más madura, cada compañía está dando sus pasos. Apple ha adquirido derechos de la MLS, la liga de fútbol profesional, además de algunos partidos de béisbol. YouTube comparte la retransmisión de partidos de fútbol americano. Otras plataformas de ‘streaming’ creadas desde canales tradicionales -como Max, de Warner Bros Discovery, o Peacock, de NBCse han lanzado a la arena con compras agresivas de derechos de varias ligas.