El Ejecutivo cambiará ley de educación superior
Está en juego el financiamiento. Las universidades protestan
El punto de conflicto es el financiamiento estatal para las universidades. El Ejecutivo, la Asamblea Nacional y los centros de educación superior no logran un consenso sobre el mecanismo de asignación de esos recursos públicos.
La semana pasada, la Asamblea reformó la ley del sector. Estableció nuevos condicionamientos para que las universidades cofinanciadas reciban y mantengan el aporte estatal. La Universidad Andina y la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) dijeron que la norma viola la autonomía universitaria.
El Ejecutivo podría tener la solución al impase. René Ramírez, titular de la Secretaría de Educación Superior, anunció que el primer mandatario vetará el texto enviado por el Legislativo.
Aunque no dio más detalles, adelantó que se reformará (otra vez) el sistema de financiamiento de las universidades.
Una de las principales preocupaciones, al menos de la Universidad Andina, es la modificación a la entrega de becas. Ayer, Jaime Breilh, rector del centro de estudios de posgrados, aseguró que -si se mantiene el esquema propuesto por la Asamblea- se politizará la entrega de ayudas económicas.
Si la beca, explicó, es una designación externa de la universidad, “es una negación absoluta de la autonomía universitaria”, dijo. Él hizo un llamado a todas las universidades y a los estudiantes para pedir la revisión de la ley.