En Julio Moreno hacen minga para retirar el lodazal
La falta de alcantarillado ahondó el problema en parroquia de Tungurahua
TEL INVIERNO EN EL PAÍS odo es silencio. En medio de tanta desolación que se observa en la parroquia Julio Moreno, a 15 minutos de Guaranda, la gente saca fuerzas para volverse a levantar.
La tarde del martes muy difícilmente se olvidará de la mente de sus habitantes. Una fuerte lluvia como nunca habían observado ocasionó el deslave que se llevó a Glenda Sisalema, cuando estaba en el patio de su casa. La palizada destruyó siete viviendas, entre ellas la iglesia; otras 14 casas fueron afectadas y 35 familias están albergadas en casas acogientes.
Luis Estrella Toalombo logró rescatar a tres de sus hijos menores de su casa, aunque se quedó sin bienes materiales. Miguel Ramírez en los 40 años que vive en la parroquia asegura que es la primera ocasión que ve mucha destrucción en el poblado. “Creo que la virgen de El Rosario nos protegió. Era tremendo ver cómo descendía palizada y llovía granizada”, comentó mientras sus pasos se dirigían hasta la casa donde reposaban los restos de la vecina víctima de la desgracia.
En los alrededores, las manos de los directores departamentales y obreros municipales se unían a la minga de limpieza. El sargento del Cuerpo de Bomberos, Darwin Cabrera, aseguró que las tareas de limpieza se realizan todo el día.
El alcalde Ramsés Torres manifestó que “si hubiese alcantarillado la afectación sería menor, porque el agua no se estancaba. Con un crédito de 2 millones que está probado se hará la obra”, agregó.