Un submarino reforzará la seguridad en las Galápagos
El Huancavilca partió ayer desde Manta. Estará mes y medio en las islas
Alas 07:00 de ayer zarpó desde el muelle internacional de Manta, el submarino Huancavilca de la Armada. Con 52 hombres a bordo, la nave reforzará la vigilancia en la zona económica exclusiva y la reserva marina de las islas Galápagos.
Esta medida se toma después de la detención de una embarcación de bandera china pescando en zona protegida y que llevaba en su interior más de 6.000 ejemplares de tiburones, entre ellos de las especies martillo y Silky.
El Huancavilca, de fabricación alemana, fue adquirido por las Fuerzas Armadas en noviembre de 2014, después de ser sometido a un proceso de modernización en los astilleros de Maestranza, en Chile.
El submarino, que con su vigilancia busca alejar a los barcos de la flota pesquera china, cuenta con tecnología de última generación de sonares, subsistema de comando y control, sensores no acústicos, electrónica pasiva, control de armas, peris- copios, plataforma inmersial, radar, ecosonda y demás equipos sofisticados. Lleva una ración alimenticia para 45 días bajo el agua.
El capitán de Fragata, Juan Liger Estévez, comandante del submarino Huancavilca, explicó que “esta nave realizará tareas de vigilancia de obtención de información”. Luego de que cumpla su misión en la zona exclusiva económica de las islas Galápagos, será relevado por su gemelo, el Shyri.
Juan Carlos Tello, capitán de Corbeta y segundo comandante del submarino, recordó que los sensores que posee la nave les permiten escuchar a gran distancia el acercamiento de alguna nave en actividades sospechosas y determinar con precisión las características de la misma.