La Metrovía solicita mejorar el diésel local

Otras ciudades usan uno que contiene hasta 50 veces menos azufre que el de Ecuador Experta insiste en mejores controles

Petroecuador aseguró en una publicación anterior, a propósito de la combustión causada por el diésel, que el que distribuye a nivel nacional cumple la norma, y recomendó analizar el estado del parque automotor en Guayaquil, luego de que el gerente de la Autoridad de Tránsito Municipal, Andrés Roche, denuncie una supuesta mala calidad de ese combustible.

A propósito de ese tema, el presidente de la Fundación Metrovía, Federico von Buchwald, responde que aunque los 139 PPM (partes por millón) de azufre que contiene el diésel de Petroecuador -que no sobrepasa los 500 PPM permitidos por la norma INENexisten otras ciudades que son mucho más exigentes. diferentes gases de escape de los automóviles con motor de combustión interna), mientras que en Ecuador, por la calidad del diésel, solo se puede utilizar la Euro 3.

“El fabricante brasileño de los buses del sistema Metrovía debió hacer caso de excepción para instalar los motores Euro 3, descontinuados en Brasil ya”, recuerda el funcionario. Lo que nuevamente lanza el balón de la contaminación, a su parecer y otra vez, en la cancha de Petroecuador.

“Con los resultados de las acciones emprendidas por varias ciudades reduciendo el contenido de azufre hasta 50 veces menos que en el Ecuador no se puede desviar la responsabilidad de la contaminación a los motores de los buses”, argumenta Von Buchwald.

Pese a aquello, la legista especializada en derecho ambiental, Inés Manzano, sostiene que el diésel Premium para uso automotriz que se distribuye aquí tiene especificaciones para un ultra bajo azufre; y que para evitar la contaminación atmosférica y consecuentes problemas hacia la salud, ecosistemas e infraestructuras, debe implementarse un riguroso programa de inspección y mantenimiento para los vehículos.

Sobre los controles, EXPRESO ha contado ya que la ATM retiró el año pasado de circulación unos 800 buses que cumplieron con su vida útil. Eran focos contaminantes. Otros 600 serán reemplazados de manera paulatina por nuevas unidades. El biólogo Luis Arriaga, sin embargo, recomienda controles periódicos.