El destino opaco de los fondos del servicio secreto
El contralor subrogante revisará en exclusiva el uso de los gastos reservados ❚ Aunque la ley lo establece, la Senain no publica el monto destinado a inteligencia
Los gastos se cuentan por millones. En los últimos cinco años, la Secretaría Nacional de Inteligencia (Senain) ha manejado, al menos, 284,7 millones de dólares en su presupuesto institucional. El uso de esos recursos será revisado, otra vez, por la Contraloría General como adelantó ayer EXPRESO.
La entidad “auditará” la auditoría que hizo el excontralor, Carlos Pólit, y que corresponde al periodo 2012-2017.
Una parte de esa revisión será de exclusiva responsabilidad del contralor subrogante, Pablo Celi. Por disposición legal, a su cargo está la verificación del uso de los “gastos especiales destinados a actividades de Inteligencia y contrainteligencia para la protección interna, el mantenimiento del orden público y defensa nacional”.
EL DETALLE Control. La Secretaría de Inteligencia solo rinde cuentas al presidente y a la Comisión de Soberanía de la Asamblea. Sus informes son reservados.
La Senain, dice la ley de Seguridad, tiene un fondo permanente para esas actividades. El monto, añade esa misma norma, “será de acceso público, no las asignaciones de los gastos que será información clasificada”. Ese monto, a pesar de lo que diga la norma, no es público.
Únicamente en 2017, la secretaría publicó un desglose de sus gastos aunque no detalló el rubro destinado a las “operaciones inteligencia y contrainteligencia” (ver gráfico).
Precisamente, el destino de esos recursos reservados ha sido, en los últimos años, motivo de polémica. En septiembre, este Diario publicó una serie de reportajes que ponía en evidencia cómo la Secretaría mantuvo bajo vigilancia a los partidos de oposición y a los movimientos sociales críticos con el Gobierno de Rafael Correa. Los informes demostraban también cómo la Senain financió encuestas electorales y definió estrategias para aprobación de normas en la Asamblea.
¿A dónde fueron a parar los recursos públicos? Por seguridad, la Senain mantiene bajo reserva los destinatarios e incluso la nómina de sus funcionarios aunque sí tendrá que informar al contralor.
El examen anterior a las cuentas de la Senain en la época de Pólit (hecho público por el activista político, Fernando Villavicencio) da algunas pistas de las irregularidades en los pago con fondos reservados. La Secretaría, por ejemplo, habría pagado 41.500 dólares a un ciudadano español por compra de información. Los pagos se realizaron en Montevideo. La Contraloría pidió una certificación a la Embajada de España que no encontró rastros de ese ciudadano.
Lo mismo pasó con el pago de 1.800,00 que se hizo por el alquiler de un vehículo. El dinero fue retirado por una persona que no consta en las bases del Registro Civil, dice el documento.