Fiscalizar, la tarea que volvieron imposible
Reglas cambiaron desde 2008 en el Legislativo ❚ Varios factores traban control político
La fiscalización y el debate son los grandes ausentes. El inexistente control político de la Asamblea Nacional, en los últimos 11 años, tendría sus orígenes en no menos de cuatro aspectos, consideran juristas y exlegisladores consultados por EXPRESO.
Los efectos de esa falta de inspección empiezan a pasar factura y saltan a la vista con un exvicepresidente condenado a seis años de prisión, por asociación ilícita, y funcionarios con graves observaciones por parte de la Contraloría General.
Hasta 2008, los congresistas hacían sus pedidos de información (paso previo para iniciar la fiscalización) directamente a la institución o funcionario sobre el que recaía la sospecha. El plazo para entregar una respuesta era de 15 días.
Con la creación de la Asamblea Nacional el mecanismo cambió. En 2012 los ministros empezaron a cumplir una orden del expresidente Rafael Correa: la disposición era que las solicitudes de información debían ser canalizadas solo por la presidencia de la Asamblea, entonces en manos de Gabriela Rivadeneira, militante de Alianza PAIS.
Bayron Pacheco, exasambleísta por el partido Avanza, recuerda que ahí se represaban los pedidos. “Y cuando daban vía libre para que se entregue la información requerida, esta llegaba mutilada con las partes que les convenían”, aseguró el exlegislador a este Diario.
El Consejo de Administración Legislativa (CAL) también llegó de la mano de la renovada Función Legislativa ideada en Montecristi y ha sumado más críticas que elogios. Ahí han ‘muerto’ algunos intentos de fiscalización, como el primer llamado a juicio político al exvicepresidente Jorge Glas.
Guillermo Landázuri, quien dirigió el Congreso entre 2003 y 2005, considera que las decisiones para iniciar los procesos de fiscalización no deben estar en manos de pocos. “Lo que se hacía La asambleísta Ana Galarza (CREO) acudió ayer a la Fiscalía para pedir que se convoque a Raúl Patiño para que amplíe sus confesiones. La legisladora reconoció que hay una mayoría oficialista que impide fiscalizar y por eso la oposición busca otros espacios para cumplir esta tarea.
EL DETALLE Encuentro. La Comisión de Fiscalización de la Asamblea Nacional recibe hoy al ministro de Trabajo, Raúl Ledesma, para hablar sobre los jubilados. LA IMAGEN
antes es dar la posibilidad de que el mayor número de legisladores aporten con pruebas para iniciar la fiscalización, que no siempre terminaba en juicio político”, señaló a EXPRESO.
Pero no todos los obstáculos al control político están atados a los cambios en las reglas del juego. La mayoría que obtuvo PAIS en los dos períodos legislativos pasados han sido perjudiciales, considera el expresidente del Esmolestoescuchar queunlegisladorno actuóporquerecibió unadisposición.debe revelarquiénordenaba laimpunidad. Congreso Wilfrido Lucero.
“Lo que pudo convertirse en una ventaja para impulsar un proyecto político se convirtió en perjuicio para el país. Los legisladores del oficialismo se convirtieron en expertos en alzar manos y aprobar leyes que les venían armadas desde el Ejecutivo y para callar ante los actos irregulares”, sostuvo.
Justamente, las confesiones del exasambleísta de Alianza PAIS Raúl Patiño van en ese sentido. Él dijo que en la Asamblea todos sabían de las obras con sobreprecio en la década de la revolución ciudadana pero que, desde las más altas esferas del oficialismo, llegó la orden de no fiscalizar.
La Asamblea también se ha caracterizado, en los últimos años, por rehuir al debate y a la rendición de cuentas de los funcionarios inmersos en temas conflictivos que requieren una explicación (ver la columna derecha).
En el mejor de los casos, las comparecencias que deberían darse en el pleno legislativo son derivadas a las discretas comisiones legislativas (dominadas en su mayoría por AP) o de plano son rechazadas en las votaciones en las que correístas y morenistas unen fuerzas, dependiendo del caso.
Varios asambleístas de PAIS estaban indignados por la corrupción. Pero al votar se imponía el espíritu de cuerpo. BAYRON PACHECO, exasambleísta de Avanza GUILLERMO LANDÁZURI, expresidente del Congreso