Las empresas, con mayor costo y menores ingresos

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El cliente pospone la compra La inflación fue negativa 5 meses en 2017 Así la economía no se recupera, dicen expertos Hay descuentos de hasta un 70 %

El 2017 terminó ofreciendo descuentos y en el nuevo año se mantienen, hay ofertas de hasta un 70 %. Para el bolsillo eso se ve atractivo, pero hay un riesgo que no beneficiará a nadie: una prolongada inflación negativa. Por el dinero que se va a inyectar a la economía, tras la colocación de los bonos que hizo el Gobierno, se va a mejorar la inflación. A decir de los expertos se ha pateado la pelota, sin que se retire totalmente el peligro de que luego se vuelva a presentar la inflación negativa.

Para visualizar el problema basta con imaginar el juego del dominó, por la inflación negativa las fichas se caen en grupo. La primera que llega a estar en el piso es la que representa a los consumidores, quienes posponen la compra esperando que los precios bajen más. El Banco Central de Ecuador prevé que el consumo de los hogares baje a un 1,7 % en este año, después de que en el 2017 cerraría a un 4 %.

Con base en ello, el analista económico Felipe Hurtado, de Profitas, dijo a un grupo de empresarios reunidos en Guayaquil que una reducción de precios puede ayudar a impulsar las ventas y eliminar inventarios. Pero en el largo plazo distorsiona el comportamiento de productores y consumidores.

Hurtado explicó que las ventas del sector comercial crecieron 9,7 % a noviembre de 2017, pero dos años atrás las ventas habían caído 14,2 %. Por lo tanto, si bien hubo una recuperación de las ventas de muchas actividades económicas, en el 2017, no llegan a lo que se vendía antes de la contracción económica. Allí la pregunta es qué tan sostenible es el crecimiento de 2017, si se considera que parte de ese aumento fue impulsado por el gasto público. Y hay que tomar en cuenta que en el índice de precios al consumidor, varios bienes muestran caídas en sus precios. Por ejemplo, el costo de las prendas de vestir tiene una caída del 4,5 %. La cifra demuestra que las empresas mantienen las ofertas para salir del stock y se intenta ganar por volumen de venta, pero eso no es sostenible en el tiempo.

Las otras fichas de dominó que caen son las que representan a las inversiones productivas, porque se vuelven menos rentables. En ese momento las inversiones financieras son más atractivas. Luego de esto hay mayor costo de financiamiento, hay caída de la producción, más desempleo y menos consumidores.

La situación se pone cuesta arriba para los empresarios. Al respecto, Daniel Legarda, presidente ejecutivo de la Federación de Exportadores de Ecuador, dijo a EXPRESO que a esta coyuntura se debe sumar que se encarecen los costos de producción, lo que hace perder competitividad.

Para los empresarios son positivos la reducción del precio de la energía eléctrica y los nuevos contratos de trabajo, pero destacan que estas medidas se deben articular con un todo, ya que por un lado se baja el costo de la energía eléctrica y por otro hay un incremento del precio del combustible, del diésel y del búnker, que son importantes para la industria. “Por lo tanto, las medidas son inconsistentes, al final hay un mayor costo de producción. Eso hace más difícil hacer negocio, crecer e incluso dificulta incrementar las exportaciones”, dijo Legarda.

Así, lo más saludable para la economía es un crecimiento basado en la producción privada, que existan precios bajos pero con base en que a la industria le cueste menos producir. La solución está en una adecuada política económica, indicaron los empresarios en la cita en Guayaquil.

EL DETALLE Divisas. Ecuador requiere unos $ 40.000 millones cada año para mover la economía. En la contracción, el monto se redujo a $ 33.000 millones, según Profitas.