El periodismo: “De sicarios de tinta y otras yerbas venenosas”
La profesión de periodista además de ser la más peligrosa del mundo es también odiada. Sorprendió que Gabriel García Márquez, premio nobel de literatura, habiendo ejercido siempre el periodismo le dijera a Margarita Vidal: “Yo me escondo de ustedes los periodistas que son unos hijos de p...” (Viaje a la memoria. Colombia 1997); pero paradójicamente reconoció que el periodismo es el mejor oficio del mundo. El presidente estadounidense, Donald Trump, calificó a los periodistas como los seres humanos más deshonestos de la tierra.
El expresidente Rafael Correa confesó detestar al imperialismo, pero estuvo de acuerdo con estos pensamientos. Motejó a los comunicadores como “odiadores disfrazados de periodistas”, “sicarios de tinta” y otras yerbas venenosas. Solo nos queda decir que en el pasado y ahora ante la mafia corruptora de la última década en nuestro país, la prensa ha sido fuerte, independiente y muy profesional para investigar, denunciar y criticar, como por ejemplo la permisividad del expresidente Correa con las FARC; precisamente por investigar este hecho cayeron asesinados cobardemente tres valerosos miembros del diario El Comercio, también cuatro infantes de Marina quienes constituyen un ejemplo de patriotismo. Ahora, Correa, sin poder ni leyes protectoras ni paniaguados jueces debe responder legalmente. Aplicando sus expresiones, le recordamos: “prohibido olvidar”.
Lic. César Burgos Flor