Juez suspende el paso de buques petroleros al Estero
La medida se da tras un pedido de medidas cautelares del Municipio ❚ El caso se investiga
El permiso que la petrolera estatal EP Petroecuador recibió para ingresar al Estero Salado con megabuques llenos de derivados, no duró mucho tiempo. Esto, luego de que el Municipio de Guayaquil consiguiera, por vía legal, suspender la licencia ambiental que permitía a la empresa emprender esta faena.
La licencia se había concedido hace dos semanas, pero el alcalde Jaime Nebot presentó una acción de medidas cautelares en contra de este permiso que autoriza el ingreso de buques de hasta 40.000 toneladas en la terminal Tres Bocas. Una petición que ayer fue aceptada en la Unidad Judicial Penal de Guayaquil “hasta que se agoten todas las vías administrativas y judiciales que se activarán para impugnar la indicada licencia ambiental”, dijo ayer el Cabildo a través de un comunicado.
EL DETALLE Trámite. Petroecuador este año volvió a pedir el permiso. En el 2017, esta posibilidad ya había sido negada por el Ministerio de Ambiente.
En la disposición del juez, también se ordena al Ministerio de Ambiente adecuar los procedimientos administrativos de licenciamiento ambiental a los parámetros constitucionales y legales que regulan el proceso de participación ciudadana y consulta. De igual forma ordenó a Petroecuador “abstenerse de toda acción o conducta que implique evasión u obstrucción de los procesos de licenciamiento ambiental”.
Desde el pasado 11 de mayo, EXPRESO viene recogiendo la preocupación que el Municipio porteño, grupos ambientalistas y representantes de la Cámara Nacional de Acuacultura, tienen en torno a la concesión de esta licencia. Permitir que en la zona se haga una descarga de grandes cantidades de diésel y gasolina es poner en riesgo el manglar, la fauna y a las personas que habitan en zonas aledañas.
Basan su preocupación en los dos derrames que se han registrado en la zona, aún cuando se ha permitido el ingreso de embarcaciones que tienen una capacidad de 15.000 toneladas. Autorizar más carga, dicen, solo incrementaría el riesgo. Petroecuador, por su parte, ha dicho a este Diario, que la gran reserva de la zona no corre peligro, y que la empresa cumple con los protocolos se seguridad necesarios para evitar y remediar posibles incidentes.