AUGUSTO BARRERA “El 79 % son docentes de institutos”
− ¿Por qué una secretaría como la Senescyt registra más de 3.400 empleados? − El caso de la Secretaría es uno particular porque está encargada de todo el personal docente de los institutos. Hay 138 institutos en todo el país que lamentablemente todavía no tienen autonomía administrativa y financiera. La realidad es la siguiente: tenemos 3.455 personas en nómina, de las cuales 2.732 son docentes y autoridades de los institutos. No son funcionarios. Eso distorsiona la cifra. Mi aspiración es que el próximo año diferenciemos a la Secretaría de los institutos. Funcionarios de la Secretaría propiamente son 723. El año anterior, cuando llegamos, éramos 866. − ¿Cuándo los institutos tendrán su autonomía para que manejen sus recursos y personal? − La Ley de Educación Superior establece esta figura de instituto universitario técnico y tecnológico. Lo que vamos a hacer es reconvertir estos institutos en 44 buenos institutos universitarios y la idea es que los profesores se reconviertan en docentes de ellos y tendrán un rol parecido al de las universidades. La reforma a la LOES faculta la creación del subsistema técnico y tecnológico. Ya puedo dar este paso que se hará durante los próximos dos años. − De los 3.455 funcionarios de la Senescyt, 2.659 están bajo contrato ocasional. ¿Cuántos de ellos son profesores y alguno ha superado el tiempo límite, ya que el ministro de Trabajo, Raúl Ledesma, dijo que los recortes de personal empezarían por empleados bajo esa modalidad? − Son contratos ocasionales, pero bajo el régimen de la Ley de Educación Superior, no de la Ley de Servicio Público. Evidentemente lo que tenemos que hacer en este periodo de transición es reconvertir sus contratos ocasionales en nombramientos. Pero en la medida que no teníamos la figura jurídica de la institución mantuvimos el concepto de contrato ocasional, pero uno bajo la Ley de Educación Superior. − Y los algo más de 11 mil funcionarios universitarios de 32 centros educativos superiores que están bajo la misma figura, ¿se encuadran en el mismo concepto? − Exactamente. Estos son contratos ocasionales que corresponden normalmente a docentes que tienen un nivel específico de carga horaria. El jueves tendré una reunión con todos los rectores y el ministro del Trabajo porque hay preocupación en torno a esto. Lo ideal es que vayamos a un proceso de regularización, pero también hay que entender que en algunos casos un contrato por unas horas de un profesor resulta mucho más rentable para la universidad que una contratación de nombramiento de tiempo completo. La directriz del Ministerio de Trabajo excluye a estas instituciones.