México vota con López Obrador como favorito
El presidenciable de izquierda tiene aliados conservadores ❚ El PRI arriesga su hegemonía; el PRD asiste dividido por la escisión
Unos 89 millones de mexicanos acudirán hoy a las urnas para optar por el continuismo que presentan los partidos de centroderecha (PRI y PAN) o dar por primera vez un giro político a la izquierda con el candidato Andrés Manuel López Obrador.
Con un país marcado por los altos niveles de corrupción y cotas históricas de inseguridad, las encuestas muestran que una amplia mayoría respalda a López Obrador, líder del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), que por tercera ocasión consecutiva se presenta a la Presidencia de México.
EL DETALLE Violencia. Guadalupe Chan, reportero en Quintana Roo, fue asesinado a balazos el viernes. Asimismo mataron a un coordinador del PRD en Guerrero.
Desde 1929 ha gobernado el Partido Revolucionario Institucional (PRI), salvo los dos sexenios del Partido Acción Nacional (PAN) con Vicente Fox (20002006) y Felipe Calderón (20062012), y los sondeos de opinión dan a López Obrador un apoyo cercano al 50 %, y en México no hay segunda vuelta.
López Obrador ha logrado agrupar en torno a Morena varias corrientes de pensamiento político, y para los comicios va en coalición con el Partido del Trabajo y Encuentro Social, este último una agrupación evangélica que ha mostrado una posición muy conservadora en temas como el matrimonio homosexual y el aborto.
El político se mide con el conservador Ricardo Anaya, de la coalición conformada por el PAN, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y Encuentro Social, y el oficialista José Antonio Meade, abanderado de la alianza entre el PRI, el Verde Ecologista de México y Nueva Alianza. El izquierdista PRD, bajo cuyas siglas López Obrador aspiró dos veces a la presidencia, asiste debilitado por la escisión que supuso la creación de Morena.
También participa, como independiente, Jaime Rodríguez Calderón, alias ‘el Bronco’.
La violencia generalizada, que acumula miles de asesinatos y desaparecidos en el país, la corrupción y la impunidad suponen los mayores retos para quien se alce como ganador tras la votación.
Solo durante el proceso unas 130 personas han sido asesinadas, incluyendo a 27 candidatos, y se han registrado más de 540 agresiones a actores políticos.
Con su voto, los ciudadanos decidirán en manos de quién quedarán los 128 cargos de senadores, 500 de diputados, ocho gubernaturas y la jefatura de Gobierno de Ciudad de México, entre otros puestos.
El reto logístico que supondrá una elección de este calibre tendrá como eje vertebral el trabajo de 1,4 millones de ciudadanos que ejercerán como funcionarios en 157.000 mesas electorales para recibir y contabilizar los votos.
Para vigilar el desarrollo de los comicios, habrá 907 visitantes extranjeros de 60 países, destacando la misión de la OEA, integrada por 60 expertos y observadores.
LA FRASE Esperoyesperamos elpueblomexicano queporfintengamos ungobiernoquedeveras trabajeparaelpueblo. ROBERTO VIVAR, 62 años, deportado en 2013