Diario Expreso

A la bio, a la bao, a la bim-bom-bao

- ✑ JAIME ANTONIO RUMBEA

Es el festivo ritmo con el que las autoridade­s buscan acompañar sus relatos sobre el mercado de valores y sus supuestos esfuerzos por dinamizarl­o. Como haciéndose barra ellos mismos, difunden incentivos que al parecer no lograrán cambiar el problema de fondo: el mercado de valores ecuatorian­o no significa nada para el hogar promedio.

¿Qué es el mercado de valores? Es la bolsa en que se transan acciones de empresas, obligacion­es, bonos, títulos; es el lugar en el que emprendimi­entos, gobiernos nacionales y locales pueden levantar recursos de terceros que confían en ellos cuando hacen las cosas bien. Es el mercado que respalda el crecimient­o de las economías, empresas y Estados mexicano, colombiano o chileno, por citar tan solo ejemplos cercanos.

Aquí, menos del 3 % del ingreso de los hogares proviene de inversione­s en propiedad o capital, rubro que en otros países es hasta diez veces superior. Ante el llamado a nueva inversión y la legislació­n que le hace son, los grandes empresario­s afinan números. Pero mientras, olvidamos que las economías que crecen cuentan con toda su población invirtiend­o en ese crecimient­o, cosa que solo puede suceder a través del mercado de valores. Y ni el llamado a la inversión ni las normas que lo acompañan nos acercan a eso.

Cual barrera de entrada para los hogares y ciudadanos de a pie, persiste la más absurda legislació­n tributaria sobre ingresos obtenidos en la bolsa. Por la vía de retencione­s sobre renta de inversione­s, el SRI exige la misma tarifa de impuesto a personas a quienes debería cobrar diferencia­damente. A la señora retirada y al gran inversioni­sta

A la señora retirada y al gran inversioni­sta les aplica por igual la máxima tarifa de retención’.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Ecuador