La caravana continúa su éxodo hacia EE. UU.
Miles de migrantes desafían las advertencias de Trump y siguen su camino ❚ La titánica caminata cobró ayer su primera víctima
Miles de hondureños continuaban ayer una titánica caminata por territorio mexicano con destino a Estados Unidos, desafiando nuevas amenazas del presidente Donald Trump de cortar la ayuda a Honduras, Guatemala y El Salvador, en represalia contra el imparable éxodo migrante.
Con escasas pertenencias y llevando niños a cuestas, más de 7.000 migrantes, según estimaciones de la ONU, reanudaron su marcha poco antes de mediodía hacia el norte de México desde Tapachula (estado de Chiapas), fronteriza con Guatemala.
Continúan rumbo a Huixtla, también en Chiapas, que será la segunda parada de muchas hasta llegar a Tijuana o Mexicali, limítrofes con Estados Unidos y a más de 3.000 kilómetros.
“Me siento fuerte, a pesar de la temperatura del sol”, afirmó Noemí Bobadilla, de 39 años, quien limpiaba bodegas en Honduras y ahora atraviesa México con una amiga y su bebé.
EL DETALLE México. El refugio para migrantes de Suchiate, estado de Chiapas, registró que 7.125 personas de la caravana entraron a territorio nacional el fin de semana.
Cientos se montaron jubilosos sobre tráileres, camionetas para transportar ganado y automóviles, gritando “¡Sí se pudo! ¡Sí se pudo!” y ondeando banderas de Honduras al pasar por la comunidad de Huehuetán, donde los vecinos se organizan para entregarles comida, agua, pañales y calcetines.
Al menos un joven perdió la vida al caer de uno de estos vehículos. Y según reportan medios locales, seis migrantes habrían muerto al volcar un tráiler en el que viajaban también en Chiapas, sin formar parte de la caravana, ejemplificando los peligros que enfrentan en la travesía.
“Estamos con todos los ánimos de seguir para arriba. Para adelante. Y en Estados Unidos esperamos a ver si nos dan el permiso para entrar”, comentó a EFE César Armando Rodríguez, un hondureño de 43 años que viaja con tres compañeros empujado por la pobreza de su país.
Trump escribió en Twitter: “Vamos a empezar a cortar, o reducir sustancialmente, la cantidad de ayuda externa que habitualmente les damos”.
El presidente lamentó además que México no haya sido capaz de detener el avance de los migrantes y puso en alerta a las patrullas fronterizasy a los militares ante esta “emergencia”.
“Parece que la policía y los militares de México son incapaces de detener la caravana que se dirige a la frontera sur de Estados Unidos. Criminales y personas de Medio Oriente no identificadas están mezclados”, acotó.
Según la no gubernamental Oficina de Washington para América Latina (WOLA, en inglés), el apoyo a Honduras pasó de 209,2 a 181,7 millones de dólares entre 2016 y 2017, un monto aún relevante para el pequeño país cuyo presupuesto
“TRATOS INHUMANOS”
nacional es menor a 10.000 millones de dólares.
“Para nosotros es un éxodo, no es un evento que tiene principio o fin... vienen más personas”, comentó en conferencia de prensa Rubén Aguilar miembro del Movimiento Migrante Mesoamericano antes de salir de Tapachula.
Gran parte de la caravana que salió hace casi diez días de San Pedro Sula, Honduras, logró ingresar a México ilegalmente y durmió en la plaza principal de Tapachula, ciudad con más de 300.000 habitantes, tras haber recorrido más de 760 km a pie. Los impulsa, según ellos, la urgencia de apartarse de la violencia criminal y los altos índices de pobreza en Honduras.